COMITÉ CIENTÍFICO de la editorial tirant humanidades
Manuel Asensi Pérez
Catedrático de Teoría de la Literatura y de la Literatura Comparada
Universitat de València
Ramón Cotarelo
Catedrático de Ciencia política y de la Administración de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Nacional de Educación a Distancia
Mª Teresa Echenique Elizondo
Catedrática de Lengua Española
Universitat de València
Juan Manuel Fernández Soria
Catedrático de Teoría e Historia de la Educación
Universitat de València
Pablo Oñate Rubalcaba
Catedrático de Ciencia Política y de la Administración
Universitat de València
Joan Romero
Catedrático de Geografía Humana
Universitat de València
Juan José Tamayo
Director de la Cátedra de Teología y Ciencias de las Religiones
Universidad Carlos III de Madrid
Procedimiento de selección de originales, ver página web:
http://www.tirant.net/index.php/editorial/procedimiento-de-seleccion-de-originales
EL PENSAMIENTO SOBRE EL TRABAJO1
John W. Budd22
Valencia, 2014
1 Título original en inglés: The Thought of Work. Editado por Cornell University Press, 2011.
22 John W. Budd es profesor de la Universidad de Minnesota (Carlson School of Management), titular de su cátedra de Relaciones Industriales y director allí del Centro de Recursos Humanos y Estudios Laborales. Graduado de Colgate University y doctorado en Economía por Princeton University. El profesor Budd es autor de Employment with a Human Face: Balancing Efficiency, Equity, and Voice (Cornell University Press), Labor Relations: Striking a Balance (McGraw-Hill/Irwin), Invisible Hands, Invisible Objectives: Bringing Workplace Law and Public Policy into Focus (con Stephen Befort; Standford University Press), además de numerosos artículos académicos. Ha sido director de estudios de postgrado en los programas en recursos humanos y relaciones industriales de la Universidad de Minnesota.
Copyright ® 2014
Todos los derechos reservados. Ni la totalidad ni parte de este libro puede reproducirse o transmitirse por ningún procedimiento electrónico o mecánico, incluyendo fotocopia, grabación magnética, o cualquier almacenamiento de información y sistema de recuperación sin permiso escrito del autor y del editor.
En caso de erratas y actualizaciones, la Editorial Tirant Humanidades publicará la pertinente corrección en la página web www.tirant.com (http://www.tirant.com).
Traducción: Francisco Gómez Abelleira, Profesor de Derecho del Trabajo, Universidad Carlos III de Madrid.
© John W. Budd
© TIRANT HUMANIDADES
EDITA: TIRANT HUMANIDADES
C/ Artes Gráficas, 14 - 46010 - Valencia
TELFS.: 96/361 00 48 - 50
FAX: 96/369 41 51
Email:tlb@tirant.com
http://www.tirant.com
Librería virtual: http://www.tirant.es
DEPÓSITO LEGAL: V-1197-2014
ISBN 978-84-15731-47-4
MAQUETA: Tink Factoría de Color
Si tiene alguna queja o sugerencia, envíenos un mail a: atencioncliente@tirant.com. En caso de no ser atendida su sugerencia, por favor, lea en www.tirant.net/index.php/empresa/politicas-de-empresa nuestro Procedimiento de quejas.
¡Ah!, ¿por qué
la vida entera ha de ser trabajo?
Alfred, Lord Tennyson (1809-92)
Prólogo del autor
A pesar de ser un aspecto tan importante de nuestras vidas cotidianas, el trabajo frecuentemente se da por supuesto, y no se cuestiona ni se piensa sobre él con gran profundidad. Es simplemente algo que tenemos que hacer. Al mismo tiempo, académicos de una impresionante variedad de disciplinas de las ciencias sociales, ciencias del comportamiento, filosofía y teología estudian el trabajo. Pero sus ideas sugerentes y su conocimiento sobre el mundo del trabajo se hallan a menudo segmentados por disciplinas y separados por conceptos, lenguajes, metodologías, congresos y revistas que son específicos de cada una. La idea de este libro surgió tanto de la excitación de descubrir tan amplia variedad de investigación poniendo de manifiesto las complejidades del trabajo y su profunda importancia desde tantas perspectivas, cuanto de las frustraciones paralelas por una percepción personal de que en el discurso público se pasa por alto la importancia del trabajo y por no llegar los especialistas a apreciar la riqueza de la investigación sobre el mismo que se ubica fuera de sus propias disciplinas.
Los académicos de las distintas ciencias sociales y del comportamiento tienen a menudo diferentes perspectivas sobre las realidades empíricas del trabajo, tales como los salarios y las condiciones laborales, el cambio tecnológico y la “descualificación”, el trabajo precario, la naturaleza de los puestos de trabajo y las carreras profesionales, la satisfacción en el trabajo y demás actitudes, el conflicto entre trabajo y familia, el liderazgo y la motivación de los empleados, así como los sindicatos y otras instituciones relacionadas con el trabajo. Tales diferencias encuentran su raíz última en los modos alternativos de pensar acerca de lo que es el trabajo. Este libro, por tanto, busca aunar diversas perspectivas sobre el trabajo para promover una comprensión multidisciplinar de esta parte esencial de la experiencia humana, y lo hace centrándose fundamentalmente en cómo se conceptualiza el trabajo: cómo pensamos acerca de su papel en nuestras vidas diarias y, más en general, en la sociedad. Pero el resultado es algo más que solo un marco para una comprensión mejorada del trabajo: es una declaración acerca de la profunda importancia del trabajo, una ventana abierta a lo que las sociedades valoran, y una demostración de que el modo en que pensamos acerca del trabajo importa para el modo en que lo experimentamos en nuestras vidas cotidianas.
Este libro podía haberse escrito de muchas maneras. El Concepto del Trabajo: Antiguo, Medieval y Moderno (1992) de Herbert Applebaum es una cronología comprehensiva de las conceptualizaciones del trabajo. La economía política del trabajo (2009) de David Spencer es una crítica centrada en cómo se conceptualiza el trabajo en una sola disciplina, en tanto que obras como la de Marek Korczynski, Randy Hodson y Paul Edward Teoría Social en el Trabajo (2006) adoptan una perspectiva disciplina por disciplina o paradigma por paradigma. En El Pensamiento sobre el Trabajo, trato de complementar estas perspectivas, construyendo sobre ellas, al integrar conceptos del trabajo a lo largo del tiempo y de las disciplinas, a fin de revelar las conceptualizaciones clave, fundamentales del trabajo. El objetivo no es una narración histórica de los conceptos del trabajo, ni una revisión del modo en que disciplinas específicas ven el trabajo, aunque lo cierto es que el libro facilita una comprensión de ambas importantes cuestiones. Más bien, el objetivo principal es entender las conceptualizaciones clave del trabajo y sus implicaciones, y este libro se estructura, por tanto, en torno a aquellas, antes que en torno a la cronología o a las disciplinas.
Con las que finalmente han sido diez conceptualizaciones del trabajo, hay matemáticamente más de tres millones de opciones para ordenar los diez capítulos. En ciertos momentos parecía como si intentase casi todas estas combinaciones, a medida que abordaba nuevas ideas, recibía opiniones ajenas y reconsideraba mi lógica. La razón del orden de los capítulos se explica en la introducción; espero que esta secuencia sea ilustrativa, pero no tengo ninguna pretensión de que sea la única aproximación posible. Puede que algunos prefiriesen ordenar los capítulos sobre la base de algún juicio de importancia o universalidad, pero tales juicios variarían sin duda según las disciplinas, incluso según las personas, y desde luego darían lugar a una multiplicidad de aproximaciones.
La amplitud del trabajo sobre el trabajo queda subrayada por el hecho de que en los capítulos que siguen se citen más de 800 fuentes. Para mantener el número de notas dentro de lo manejable, las referencias se citan por párrafo más que por frase. Donde es necesario, las notas contienen breves anotaciones vinculando una o más fuentes a la(s) frase(s) o idea(s) relevante(s) del texto. Note amablemente el lector que las anotaciones no necesariamente captan el contenido de una fuente; más bien, apuntan a un tema o a una expresión en el texto a fin de conectar el texto y las fuentes. El orden de las citas en cada nota sigue el orden de las ideas citadas en cada párrafo.
Como muchas otras formas de trabajo, escribir este libro ha sido una empresa cooperativa. Por comentarios inestimables acerca de uno o más capítulos y/o conversaciones de gran ayuda, extiendo mi sincero agradecimiento a Patty Anderson, Avner Ben-Ner, Devasheesh Bhave, Joyce Bono, Bob Bruno, Dan Forbes, Theresa Glomb, Lonnie Golden, Lisa Leslie, Jim Scoville, David Spencer, Andrew Timming, Connie Wanberg, Stefan Zagelmeyer, a dos revisores anónimos y a los participantes en la conferencia y talleres del Congreso Europeo de la Asociación Internacional de Relaciones Industriales (Copenhagen), del encuentro anual de la Asociación de Relaciones Laborales (Atlanta), a la London School of Economics, a la Universidad de Minnesota, a la Universidad de Warwick y a la sección de Londres-centro de la Asociación de Relaciones Industriales de las Universidades Británicas (BUIRA). También estoy agradecido a Linda Clarke, Alex Koch y Mingwei Liu por señalarme generosamente la literatura de investigación relevante para determinadas cuestiones, a Greg Budd y Gaolee Vang por su precisa ayuda con las referencias y las citas, a Fran Benson, de Cornell University Press, por su apoyo y a Ange Romeo-Hall y otros en Cornell University Press por su profesional trabajo de navegar en el manuscrito sin contratiempos durante el proceso de producción. El Pensamiento sobre el Trabajo es también el producto de muchos años. Su terminación no habría sido posible sin un sabático de la Universidad de Minnesota, y estoy enormemente agradecido por ese año de poder trabajar casi exclusivamente en este proyecto.
El Pensamiento sobre el Trabajo está dedicado a mis tres hijos, quienes pronto habrán de llegar a su propias conclusiones en cuanto al pensamiento sobre el trabajo.
Minneapolis, Minnesota
Agosto, 2010
Introducción
Mi trabajo me sostendrá
John Milton (1608-74)
El tema de este libro es cómo pensar sobre el trabajo. Profunda y fundamentalmente. ¿Qué es realmente el trabajo? ¿Y por qué importa?
La palabra inglesa “work” (trabajo) encuentra su raíz en el vocablo del antiguo indo-europeo “werg”, que significa “hacer”, y está por tanto etimológicamente relacionada con palabras como “energía” (“en acción”), “letargo” (“sin trabajo o actividad”), “alergia” (“acción antagónica”), “sinergia” (“acción conjunta”), “liturgia” (“actividad pública”) y “órgano” (“una herramienta” como en “trabajar con algo”). El Oxford English Dictionary además refiere veintiuna definiciones de “work” como sustantivo y cuarenta como verbo. Estos datos lingüísticos sobre el vocablo “work” reflejan las realidades del trabajo humano —presentes en muchos elementos de la experiencia humana y en muy distintos modos—. De esta forma, pensar sobre lo que el trabajo sea requiere un enfoque comprehensivo.
Tras cierta reflexión, podría equipararse trabajo con empleo remunerado y puesto de trabajo, pero existen otras formas de trabajo. Algunas familias pagan servicios de limpieza, centros para el cuidado de los hijos y otros familiares, todo ello a fin de llevar a cabo las tareas domésticas, las derivadas de la paternidad o maternidad o del cuidado de los mayores; todas estas tareas no dejan de ser trabajo cuando las asumen los propios miembros de la familia, sin recibir remuneración. Del mismo modo que la faena agrícola es trabajo, lo es la agricultura de subsistencia, incluso cuando lo cosechado se destina al autoconsumo en el seno del núcleo familiar, más que a su venta en el mercado. De hecho, la reunión de una serie de tareas para configurar un puesto de trabajo remunerado es un fenómeno muy reciente en la historia humana1. Se necesita, por tanto, una definición amplia de trabajo, al objeto de reflejar y respetar las diversas formas que adopta en distintos tiempos y lugares.
Esto no significa, sin embargo, que la definición de trabajo deba ser demasiado amplia. Trabajar implica siempre hacer algo, pero esto último también puede decirse de muchas actividades de ocio. Una definición de trabajo que tenga sentido, por ello, debe ubicarse en algún punto intermedio entre la demasiado limitada de empleo remunerado y la excesivamente amplia que incluye toda actividad humana. Por consiguiente, en este libro entendemos por trabajo toda actividad humana voluntaria que conlleva alguna exigencia mental o física, que no se lleva a cabo sólo por placer y que ostenta un valor económico o simbólico. Quede claro que el empleo se incluye en la definición de trabajo, pero que empleo y trabajo no son sinónimos, porque el de trabajo es un concepto más amplio. Igualmente, el trabajo se percibe normalmente como factor de valor económico, pero también puede ser que produzca valor simbólico, como ocurre en los casos en los que el trabajo sirve para crear un sentido de identidad. Por último, algunos autores distinguen entre labor y trabajo (labor, work)2. Para evitar la inevitable confusión en torno a diferencias semánticas, “labor” se emplea en este libro como un sinónimo de “work” (trabajo), y cualquier posible diferencia entre estos dos términos se presenta como el resultado de distintas conceptualizaciones del trabajo.
Hay que admitir que los patrones culturales definen lo que se valora como trabajo o quién es considerado trabajador en distintos espacios y tiempos. En China, los empleos remunerados se consideran trabajo, pero hay diferentes opiniones acerca de si el laboreo agropecuario, los pequeños negocios familiares y otras actividades son trabajo. Las mujeres turcas frecuentemente tejen o se implican en actividades artesanales mediando remuneración por pieza, pero ellas mismas no contemplan esto como trabajo3. En muchas sociedades modernas, quienes realizan el trabajo doméstico del propio hogar, sin remuneración, no se consideran trabajadores. Queda fuera del alcance de este libro explicar por qué ciertas construcciones sociales del trabajo dominan en diferentes culturas o tiempos. La amplia definición de trabajo utilizada aquí no se propone, por tanto, como propia de una cultura específica: no determina que exista trabajo allí donde la sociedad reconoce su valor económico; más bien, entiende por trabajo la actividad humana voluntaria que conlleva exigencias físicas o mentales, que no se lleva a cabo sólo por placer y que tiene valor, si visto desde una perspectiva ampliamente inclusiva. El hijo chino que trabaja en el negocio familiar, la hija turca que teje para elevar la renta familiar, o el cónyuge norteamericano que cuida de la familia, todos trabajan en el sentido de esta definición.
Dicho de otro modo, la definición de trabajo utilizada en este libro pretende reforzar una aproximación amplia e inclusiva a la reflexión sobre el mismo, y no tanto delimitar exactamente qué es y qué no es trabajo. Como la socióloga Miriam Glucksmann defiende, definir trabajo no debería constituir “una discusión sobre palabras, sino sobre cómo conceptualizar el trabajo de una manera útil y coherente”. Para fortalecer una aproximación amplia al hecho del trabajo, la Tabla 1 muestra cómo este puede darse dentro o fuera de los hogares y cómo puede ser remunerado o no. Este esquema incluye no sólo los empleos remunerados y los proyectos profesionales que constituyen el verdadero trabajo para muchos individuos en las sociedades modernas e industrializadas, sino también la actividad no remunerada de cuidar de los demás, el autoempleo, la agricultura de subsistencia, el trabajo puntual en el sector informal, así como otras actividades fuera de los límites normales occidentales de puestos de trabajo remunerados y aspiraciones de carrera profesional. Las actividades de voluntariado son también trabajo. Aunque tales actividades carecen de compensación monetaria, a menudo consisten en las mismas tareas que los empleos remunerados y pueden proporcionar la misma satisfacción intrínseca e idénticos beneficios sociales que el empleo remunerado. En otras palabras, el trabajo implica la producción de algo de valor, incluso si el productor no recibe remuneración y actúa por motivaciones que van más allá de ganarse la vida4.
TABLA 1
TIPOS DE TRABAJO
REMUNERACIÓN |
||
ESFERA DE ACTIVIDAD |
REMUNERADO |
NO REMUNERADO |
Fuera del hogar o ámbito familiar |
Empleos asalariados |
Voluntariado |
Empleos puntuales |
Servicio civil |
|
Autoempleo |
Esclavitud |
|
Dentro del hogar o ámbito familiar |
Agricultura familiar |
Agricultura de subsistencia |
Negocios familiares |
Trabajo doméstico |
|
Trabajo en el hogar por encargo |
Cuidado de hijos y mayores |
|
Esclavitud |
De todos modos, la frontera entre el trabajo y otras actividades de la vida, especialmente el ocio, es a menudo borrosa. Para aquellas personas cuyos empleos son poco gratificantes, es probable que la línea divisoria entre trabajo y ocio sea clara, pero para aquellas otras que son cuidadores o para quienes disfrutan de carreras satisfactorias, la línea puede ser bastante imprecisa. Un padre que lleva a su hijo a la piscina podría ver esto como trabajo un día y como ocio otro. Jugar al golf es ocio para la mayoría, pero trabajo para los profesionales que se ganan la vida jugando. Las fronteras entre la esfera laboral y la no laboral se difuminan también por teléfonos como los “smart phones” y por otras tecnologías que ligan a los empleados al trabajo a todas horas, así como por empleadores que intentan regular las actividades no laborales de sus empleados, llegando a despedirlos por fumar, beber, cometer adulterio o conducir una moto fuera del trabajo5. Todo este conjunto de ambigüedades refuerza la necesidad de una aproximación inclusiva a la reflexión sobre el trabajo —incluyendo el remunerado y el no remunerado—, incluso aunque los contornos definitorios del mismo no sean siempre perfectamente claros.
La amplitud del espacio en que el trabajo despliega su importancia para la experiencia humana y la necesidad de una aproximación inclusiva quedan, además, reflejadas en el espectro de disciplinas y áreas académicas que estudian el trabajo, incluyendo antropología, arqueología, economía, estudios étnicos, geografía, historia, recursos humanos, relaciones industriales, derecho, administración de empresas, comportamiento organizativo, filosofía, ciencia política, psicología, sociología, teología y estudios de la mujer. La división académica del trabajo en disciplinas especializadas, sin embargo, genera perspectivas diversas sobre nuestro objeto. Y de este modo, si bien la vasta naturaleza del trabajo se refleja en sus diferentes conceptualizaciones académicas —forma de servir o cuidar de los demás, fuente de libertad, mercancía económica, método de realización personal, o relación social configurada por clase, género y poder—, tales conceptualizaciones raramente se integran entre disciplinas. En El Pensamiento sobre el Trabajo, trato, al mismo tiempo, de dar cabida a esta amplitud y de establecer puentes en esta división académica del trabajo, al objeto de promover un entendimiento más profundo y multidisciplinar del trabajo a través de extraer, integrar y sintetizar las ricas concepciones intelectuales del mismo existentes en las ciencias sociales y del comportamiento y en diversas tradiciones filosóficas.
1 El trabajo cuando las personas emprenden las mismas tareas: Robert W. Drago, Striking a Balance: Work, Family, Life (Boston: Dollars and Sense, 2007). Reunión de tareas: William Bridges, JobShift: How to Prosper in a Workplace without Jobs (Reading, MA: Addison-Wesley, 1994).
2 Valor simbólico: Anthony P. Cohen, “The Whalsay Croft: Traditional Work and Customary Identity in Modern Times”, en Sandra Wallman, ed., Social Anthropology of Work (Londres: Academic Press, 1979): 249-67. Labor/trabajo: Hannah Arendt, The Human Condition (Chicago: University of Chicago Press, 1958) [traducción al español: La condición humana (Barcelona: Paidós, 2005)]; Guy Standing, Work after Globalization: Building Occupational Citizenship (Cheltenham, Gloucestershire, UK: Edward Elgar, 2009).
3 Patrones culturales que definen: Sabine Gürtler, “The Ethical Dimension of Work: A Feminist Perspective”, trad. Andrew F. Smith, Hypatia 20 (Spring 2005): 119-34. China: Gail E. Henderson et al., “Re-Drawing Boundaries of Work: Views on the Meaning of Work (Gongzuo)”, en Barbara Entwisle y Gail E. Henderson, eds., Re-Drawing Boundaries: Work, Households, and Gender in China (Berkeley: University of California Press, 2000): 33-50. Turquía: Jenny B. White, Money Makes Us Relatives: Women’s Labor in Urban Turkey (Austin: University of Texas Press, 1994).
4 Miriam A. Glucksmann, “Why ‘Work’? Gender and the ‘Total Social Organization of Labour’”, Gender, Work, and Organization 2 (April 1995): 63-75, pg. 69. Producción de algo de valor: E. Kevin Kelloway, Daniel G. Gallagher, Julian Barling, “Work, Employment, and the Individual”, en Bruce E. Kaufman, ed., Theoretical Perspectives on Work and the Employment Relationship (Champaign, IL: Industrial Relations Research Association, 2004): 105-31.
5 Fronteras borrosas: Herbert Applebaum, The Concept of Work: Ancient, Medieval, and Modern (Albany: State University of New York Press, 1992); John T. Haworth y A. J. Veal, eds., Work and Leisure (Londres: Routledge, 2004); David Kaplan, “The Darker Side of the ‘Original Affluent Society’”, Journal of Anthropological Research 56 (Autumn 2000): 301-24. Cuidadores: Kathy Peiss, Cheap Amusements: Working Women and Leisure in Turn-of-the-Century New York (Philadelphia: Temple University Press, 1986). Carreras que realizan a las personas: Robert A. Stebbins, Between Work and Leisure: The Common Ground of Two Separate Worlds (New Brunswick, NJ: Transaction Publishers, 2004). Regulando actividades no laborales: Terry Morehead Dworkin, “It’s My Life—Leave Me Alone: Off-the-Job Employee Associational Privacy Rights”, American Business Law Journal 35 (Fall 1997): 47-99.