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Ciencia, valores y poder

Ciencia, valores y poder. Una mirada a los discursos de divulgación científica en Colombia

 

Resumen

La divulgación científica ha funcionado en diferentes momentos y contextos como una estrategia de política científica para articular las relaciones que se espera de la ciencia y la tecnología con la sociedad. El interés de esta obra es comprender qué ha sucedido en Colombia en este ámbito y su objetivo principal es analizar el uso de los discursos de divulgación científica en la política científica colombiana identificando tres factores: los agentes sociales que emiten tales discursos, los valores/actitudes que esos agentes sociales quieren promover hacia la ciencia y la tecnología mediante dichos discursos, y los modelos comunicativos que emplean para tal fin. Esta obra muestra que existe una desarticulación importante entre valores/actitudes y modelos comunicativos. Esto sugiere que, para promover dichos valores/actitudes, los agentes sociales han considerado como irrelevante qué modelos comunicativos se empleen. Así, esos discursos aparecen como puramente programáticos o retóricos. El trabajo se aborda desde el enfoque conocido como estudios CTS e integra conceptos y métodos provenientes de campos teóricos como las políticas públicas, la comunicación pública de la ciencia y la tecnología, los estudios culturales de la ciencia y la tecnología, y la historia y la filosofía de la ciencia y la tecnología.

 

Palabras clave: divulgación científica, política científica, ciencia y tecnología, modelos de comunicación pública de la ciencia y la tecnología, déficit, democracia.

 

 

Science, values and power. A look at the discourses of scientific dissemination in Colombia

 

Abstract

Scientific dissemination has operated in different moments and contexts as a scientific policy strategy to articulate relationships expected from science and technology with regard to society. This work seeks to understand what has happened in Colombia in this area and its main objective is to analyze the use of discourses of scientific dissemination in Colombian scientific policy by identifying three factors: social agents that issue these discourses, values/attitudes that these social agents want to promote towards science and technology through such discourses, and communicative models they use for such purpose. This work shows that there is an important disarticulation between values/attitudes and communicative models. It suggests that, in order to promote these values/attitudes, social agents have considered as irrelevant which communicative models to use. Consequently, these discourses appear as purely programmatic or rhetorical. The approach used in the book is known as STS studies and integrates concepts and methods from different theoretical fields such as public policy, public communication of science and technology, cultural studies of science and technology, and history and philosophy of science and technology.

 

Keywords: scientific dissemination, scientific policy, science and technology, public communication models of science and technology, deficit, democracy.

 

Citación sugerida / Suggested citation

Escobar Ortiz, J. M. (2019). Ciencia, valores y poder. Una mirada a los discursos de divulgación científica en Colombia. Bogotá: Editorial Universidad del Rosario.

https://doi.org/10.12804/th9789587843118

Ciencia, valores y poder

Una mirada a los discursos de divulgación científica en Colombia

 

 

 

 

 

 

Jorge Manuel Escobar Ortiz

Escobar Ortiz, Jorge Manuel

Ciencia, valores y poder. Una mirada a los discursos de divulgación científica en Colombia / Jorge Manuel Escobar Ortiz. – Bogotá: Editorial Universidad del Rosario, 2019.

 

xxvi, 220 páginas.

Incluye referencias bibliográficas.

 

1. Comunicación científica 2. Ciencia y tecnología 3. Política científica 4. Acceso a la información 5. Investigación y desarrollo – Colombia – 6. Política nacional de información – Colombia I. Universidad del Rosario. II. Título III.

 

338.926  SCDD 20

 

Catalogación en la fuente – Universidad del Rosario. CRAI

 

SANN Junio 17 de 2019

Hecho el depósito legal que marca el Decreto 460 de 1995

 

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Ciencias Humanas

 

©  Editorial Universidad del Rosario

©  Universidad del Rosario

© Jorge Manuel Escobar Ortiz

© Jorge Márquez Valderrama, por el Prólogo

 

 

Editorial Universidad del Rosario

Carrera 7 No. 12B-41, of. 501 • Tel: 2970200 Ext. 3112

editorial.urosario.edu.co

Primera edición: Bogotá D. C., septiembre de 2019

 

ISBN: 978-958-784-310-1 (impreso)

ISBN: 978-958-784-311-8 (ePub)

ISBN: 978-958-784-312-5 (pdf)

DOI: https://doi.org/10.12804/th9789587843118

 

Coordinación editorial: Editorial Universidad del Rosario

Corrección de estilo: Leonardo Holguín Rincón

Diseño de cubierta y diagramación:  Precolombi EU-David Reyes

Conversión ePub: Lápiz Blanco S.A.S.

 

Hecho en Colombia

Made in Colombia

 

 

Los conceptos y opiniones de esta obra son de exclusiva responsabilidad de sus autores y no comprometen a la Universidad ni sus políticas institucionales.

 

El contenido de este libro fue sometido al proceso de evaluación de pares, para garantizar los altos estándares académicos. Para conocer las políticas completas, visitar: editorial.urosario.edu.co

 

Todos los derechos reservados. Esta obra no puede ser reproducida sin el permiso previo por escrito de la Editorial Universidad del Rosario.

Autor

 

 

 

 

 

JORGE MANUEL ESCOBAR ORTIZ

 

Doctor en Ciencias Humanas y Sociales. Magíster en Historia y Filosofía de la Ciencia y magíster en Filosofía, con un pregrado en Filosofía. Se ha desempeñado como docente e investigador universitario. Actualmente coordina el programa de maestría en Estudios de Ciencia, Tecnología, Sociedad e innovación (Estudios CTS+i) del Instituto Tecnológico Metropolitano (ITM) de Medellín y hace parte del grupo de investigación en Estudios CTS+i de la misma institución. Sus principales áreas de interés son la historia y la filosofía de la ciencia y la tecnología, la política científica y tecnológica, la comunicación pública de la ciencia y la tecnología, y los estudios CTS. También ha trabajado con la Corporación Parque Explora de Medellín en proyectos educativos y de política científica nacional para  Colciencias sobre el reconocimiento y la creación de Centros de Ciencia en Colombia.

Entre sus publicaciones recientes se encuentran: “La apropiación social de la ciencia y la tecnología como eslogan: un análisis del caso colombiano”. Revista Iberoamericana de Ciencia, Tecnología y Sociedad (2018), 13 (38), 29-57; “El problema del déficit en los modelos democráticos de divulgación científica”. Arbor (2017), 193 (785), a407 y “Los orígenes del discurso de apropiación social de la ciencia y la tecnología en Colombia”. Análisis Político (2017), 91, 146-163.

Contenido

 

 

 

 

Agradecimientos

Lista de abreviaturas

Prólogo

Introducción

1. Estado, ciencia y sociedad: concepciones de política científica

1.1. Una mirada al concepto y a la historia de las políticas públicas

1.2. El concepto de política científica

1.3. Transiciones en la teoría y la práctica de la política científica

1.3.1. El contexto global

1.3.2. El contexto latinoamericano

1.4. La política científica en Colombia

1.4.1. Antes de 1968: la formación de un nuevo campo

1.4.2. Colciencias y la institucionalización de la política científica (1968-1990)

1.4.3. La política científica y el Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología (1990-2017)

1.5. Observaciones finales

 

2. Divulgación de ciencia y tecnología: aspectos teóricos

2.1. Divulgación, vulgarización, popularización, comunicación, apropiación y similares: aspectos terminológicos

2.2. El problema del déficit: ¿político o epistémico?

2.3. Modelos comunicativos de divulgación científica

2.3.1. Modelos de propagación-degradación del conocimiento científico y tecnológico

2.3.2. Modelos de continuidad entre ciencia, tecnología y sociedad

2.3.3. Modelos democráticos

2.4. Observaciones finales

 

3. La divulgación científica en la política científica colombiana

3.1. El problema de la estructura institucional: la divulgación científica antes de 1968

3.1.1. Divulgación científica y los procesos de Independencia

3.1.2. La primera fase republicana (1819-1860)

3.1.3. De la República federal a la República conservadora (1860-1910)

3.1.4. Desaparición y reaparición de la divulgación científica en el siglo xx (1910-1960)

3.1.5. A manera de cierre

3.2. Un lugar para la divulgación científica (1968-1990)

3.2.1. Una década de silencio (1968-1980)

3.2.2. La consolidación de la divulgación científica (1980-1990)

3.2.3. A manera de cierre

3.3. La articulación en la política científica (1990-2017)

3.3.1. La divulgación científica deviene apropiación social (1990-2000)

3.3.2. El éxito de un eslogan (2000-2009)

3.3.3. La apropiación social como estrategia nacional (2009-2017)

3.3.4. A manera de cierre

3.4. Observaciones finales

 

Conclusiones

Bibliografía

Per Anna

 

 

 

 

ELLA VIENE caminando en puntillas.

Él no la oye.

Desde atrás unas manos lo vendan.

¿Quién soy? Es la pregunta; la voz suena mudada.

Él quiere responder y no atina

pero sonríe, adivinando que es ella.

 

JOSÉ MANUEL ARANGO

Agradecimientos

 

 

 

 

 

Quiero agradecer la flexibilidad y la paciencia que en muchos momentos tuvieron conmigo amigos y colegas en el Instituto Tecnológico Metropolitano de Medellín y en el Parque Explora, cuando yo trabajaba en ambas instituciones simultáneamente, y además debía avanzar en mis estudios doctorales y en la tesis en que se apoya este libro. La libertad de usar mi tiempo como creyera más conveniente me permitió no solo cumplir con mis responsabilidades allí, sino también aprender y comprender muchas cosas que, sin planearlo, encontrarían un lugar importante en este trabajo.

También quiero agradecer a esa masa anónima de funcionarios de bibliotecas y centros de documentación dedicados a la digitalización de textos que luego se ponen al servicio de otros en la red. Aunque tal vez ninguno de ellos llegue a leer ni una sola de las líneas que componen este trabajo, todos hicieron posible mi acceso a una gran cantidad de fuentes nacionales e internacionales que no habría podido consultar de ninguna otra forma, o al menos no con facilidad.

Gran parte de mi gratitud es para Jorge Humberto Márquez Valderrama, que dirigió mi tesis doctoral. Su entusiasmo por este proyecto, incluso antes de conocernos, cuando apenas éramos un par de párrafos en un correo electrónico, se convirtió en un apoyo significativo y una motivación permanente para continuar adelante. A esto hay que sumar sus orientaciones con lecturas, conversaciones y observaciones sobre los borradores de cada uno de los capítulos, y su defensa del proyecto cuando las situaciones no eran favorables. La tranquilidad con la que se puede conversar con Jorge sobre estos y otros temas me permitió tomar siempre con placer todo el trabajo que requirió este estudio.

Mi mayor gratitud va a mi familia (mi padre, mi madre, mis hermanas, mis sobrinas, mi sobrino, Jose), a unas copitas y al trío miseria, que no dejaron que cayera cuando, poco antes de iniciar este proyecto, casi todo se había ­desmoronado, excepto ellos. También a los tibios, por alegrar tantos días y tantas noches en que elegí no trabajar en esta investigación, como lo imponía el deber ser. Y, por supuesto, a Anna, que una noche cualquiera, sin esperarla, apareció caminando de puntillas y me tocó el hombro para que yo la acompañara adonde ella fuera.

Una mención adicional, pero no por ello menor, merecen el Taller de Escritores de la Biblioteca Pública Piloto de Medellín y su director, el escritor Jairo Morales Henao, por haberme enseñado a leer y a escribir.

También agradezco las observaciones minuciosas de la profesora Mónica Lozano, los profesores Carlos Osorio y Alexis De Greiff (integrantes del comité evaluador de mi tesis doctoral) y de dos evaluadores anónimos de la Editorial Universidad del Rosario, que a pesar de los desacuerdos que puedan seguir existiendo, me ayudaron a reformular algunas ideas y algunos pasajes del texto con mayor claridad. Y a la Editorial por todo su acompañamiento en este proceso.

Finalmente, quiero agradecer a los editores de las siguientes revistas, que amablemente autorizaron el uso de material para este libro que yo había ya publicado previamente en ellas. Algunas secciones del segundo capítulo aparecieron en Arbor: Ciencia, Pensamiento, Cultura con el título de “El problema del déficit en los modelos democráticos de divulgación científica” (Escobar Ortiz, 2017a) y en Trilogía: Ciencia, Tecnología, Sociedad con el título de “Modelos de propagación-degradación del conocimiento científico y tecnológico” (Escobar Ortiz, 2017c). Secciones del primer capítulo aparecieron también en Trilogía: Ciencia, Tecnología, Sociedad con el título de “El diseño de la política científica en América Latina: organismos internacionales, gobiernos nacionales y comunidades científicas” (Escobar Ortiz, 2018b), y secciones del tercer capítulo en Revista Iberomericana de Ciencia, Tecnología y Sociedad con el título de “La apropiación social de la ciencia y la tecnología como eslogan: un análisis del caso colombiano” (Escobar Ortiz, 2018a). Por último, secciones del primer y del tercer capítulo aparecieron en Análisis Político con el título de “Los orígenes del discurso de apropiación social de la ciencia y la tecnología en Colombia” (Escobar Ortiz, 2017b).

Lista de abreviaturas

 

 

 

 

 

AC

apropiación del conocimiento

ACAC

Asociación Colombiana para el Avance de la Ciencia

ACC

apropiación de la cultura científica

ACCC

apropiación cultural del conocimiento científico

ACCyT

apropiación cultural de la ciencia y la tecnología

AMCyT

apropiación masiva de la ciencia y la tecnología

ASC

apropiación social del conocimiento

ASCyT

apropiación social de la ciencia y la tecnología

AT

apropiación de la tecnología

BID

Banco Interamericano de Desarrollo

CENDOC

Centro de Documentación de Colciencias

CNCyT

Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología

DANE

Departamento Administrativo Nacional de Estadística

DNP

Departamento Nacional de Planeación

estudios CTS

estudios de ciencia, tecnología y sociedad

ICFES

Instituto Colombiano para el Fomento de la Educación Superior

OCDE

Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos

OCyT

Observatorio Colombiano de Ciencia y Tecnología

OEA

Organización de Estados Americanos

PLACTS

Pensamiento Latinoamericano en Ciencia, Tecnología y Sociedad

PPCyT

percepción pública sobre la ciencia y la tecnología

SGR

Sistema General de Regalías

SNCyT

Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología

SNI

Sistema Nacional de Información

UNESCO

Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura

Prólogo

 

 

 

 

 

En Colombia, las investigaciones sobre la divulgación científica son raras y recientes. No es este el lugar para explicar las razones de este escaso desarrollo, pero me atrevo a contradecir el lugar común según el cual nuestra tímida relación con la divulgación de las ciencias como objeto de estudio se relaciona con una posición marginal de Colombia frente al desarrollo de las ciencias. En realidad, las relaciones entre la sociedad, los investigadores y la divulgación científica son problemáticas en todos los países y la divulgación aparece siempre como un campo secundario con respecto a las ciencias, ni siquiera subordinado a ellas, sino solo como una especie de simulacro. Aunque hay que aclarar que solamente me refiero a sociedades occidentales o muy occidentalizadas como la nuestra, cuya tradición filosófica ha favorecido el asentamiento de un conjunto de prejuicios sobre la comunicación y la transmisión del saber. La divulgación científica como objeto de investigación sigue siendo, ciertamente, un objeto menor, pero no por defecto de ciencia, sino por abundancia de ideología.

De ahí que haya que examinar someramente esta ideología antigua. Y es necesario comenzar por la semántica de la divulgación científica. Evocar las diversas formas de nombrarla interesa porque rebasa el problema semántico y muestra la tradición filosófica (platónica) en la que se inscriben los prejuicios frente a las formas de acceso al conocimiento. El sintagma que el autor de este libro escogió para nombrar su objeto de investigación no escapa al viejo dualismo occidental que separa a la gente entre sabia e ignorante.

Divulgación, popularización y vulgarización han sido los tres términos más desvalorizados a partir del lugar común que los trata como vocablos tras los que subyace una relación de acceso a la ciencia calificada de vertical y deficitaria. En lo alto de esa relación estaría quien posee el conocimiento y en los niveles bajos los ignorantes, afectados de algún déficit que les impide acceder a la verdad ­verdadera y, por ende, a quienes la curiosidad humana solo conduce a especies de simulacros. Aunque propio del platonismo, ni el mismo Platón apoyaba siempre ese prejuicio. Pero la tradición pesa y sigue muy vigente ese tópico confortable, como un atajo del pensamiento para no ocuparse de lo problemático. Jorge Manuel Escobar Ortiz lo detectó en documentación diversa en sus orígenes, pero especializada en el problema (hasta en documentos del siglo XXI) y lo analizó para varias series de su corpus rico y absolutamente representativo.

Pienso que a la divulgación científica no le quita ni le pone que la llamen así o que la denominen popularización o vulgarización. La discusión sobre las cartas de nobleza de esos tres términos ya está zanjada y eso lo muestra de forma aguda el autor de este libro. Además, las otras denominaciones, las que se pusieron de moda por escapar a las tres vilipendiadas, no son menos problemáticas, cada una a su modo. Aunque la lista es larga, enumeremos solo algunas: “comprensión pública de la ciencia”, “cultura científica”, “educación no formal”, “apropiación social de la ciencia y la tecnología” (ASCyT). En esta última debió detenerse más tiempo el autor, porque fue asumida oficialmente para nombrar una política pública en Colombia, a la cual pertenecen los elementos del amplio corpus que la investigación analiza.

La selección del corpus documental para esta investigación fue muy rigurosa. El investigador se propuso conocer los fundamentos conceptuales, políticos y culturales de un ámbito específico de un sector (la divulgación científica) de una política pública (la de ciencia y tecnología). Y su pregunta se focalizó en el porqué y el cómo de la integración deliberada en esa política nacional, de los discursos de promoción de la divulgación científica como medio de acercamiento entre expertos y profanos en una sociedad democrática. No se trata de ninguna obviedad y, sin embargo, nadie había emprendido semejante tarea: averiguar cómo y por qué había que integrar estrategias de fomento de la divulgación científica en la política de ciencia y tecnología de un país.

Explico por qué dije que el corpus es rico y absolutamente representativo. La política pública que por primera vez se estudia con herramientas avanzadas del campo de las ciencias sociales y humanas tuvo su momento de génesis, su desarrollo y se supone que sigue vigente en nuestro país y ha producido numerosos documentos. Aun cuando el investigador no pretendía ser exhaustivo al establecer sus series documentales, no dejó de lado ningún tipo de discurso oficial de esta política ni tampoco excluyó los que se publicaron sobre ella. Así, esta investigación analiza varios niveles de producción sobre la divulgación científica como política de Estado: las discusiones, las motivaciones de las discusiones y el contexto internacional, los resultados de esas discusiones, la legislación, las orientaciones oficiales dirigidas a diversos actores, los documentos de trabajo, pero también lo que varias personas implicadas en esta política han considerado como una especie de visión objetiva sobre ella. Y en esta última categoría se incluyen artículos de revista, libros y capítulos de libro que se supone han sido resultados de investigación. El método ha sido impecable y ha permitido al autor detectar y organizar lo dicho, lo no dicho, pero también lo publicado en forma de glosas y comentarios, la producción primaria y la literatura crítica. Este rigor metodológico dio como resultado una indagación muy satisfactoria del proceso de formación de los lugares comunes y las bases ideológicas de la llamada “apropiación social de la ciencia y la tecnología en Colombia”.

El autor decidió someter el conjunto de problemas ligados a esta política pública a un campo muy fecundo de herramientas de las ciencias sociales y humanas contemporáneas que se autodenomina “ciencia, tecnología y sociedad” o enfoque CTS. No se trata de una manera de referirse a la divulgación científica, sino de una perspectiva crítica que analiza y explica las relaciones biunívocas entre la ciencia, la tecnología y la sociedad. A partir de este enfoque, el problema de la comunicación de la ciencia y la tecnología es uno de los aspectos (no secundario) de un conjunto de relaciones más amplio y más complejo que el de la comunicación entre los expertos y la sociedad. Este enfoque propone y permite estudiar los problemas de la comunicación enlazados con los compromisos políticos, económicos, educativos y epistémicos implicados en las relaciones entre la ciencia, la tecnología y la sociedad.

Específicamente, el libro de Escobar Ortiz utiliza de manera lúcida el enfoque CTS para analizar los discursos sobre divulgación científica producidos en Colombia desde cuando ocurrió lo que él llama “el giro colombiano hacia la comprensión de la divulgación científica como ASCyT a mediados de los años noventa”. Este giro está estrechamente relacionado con cambios deliberados en la política pública colombiana de ciencia y tecnología, que se han adelantado como parte de una estrategia de adaptación del Estado colombiano a la transición de finales de la década de 1980 y comienzos de la década de 1990, de un Estado proteccionista en economía a un Estado obediente a lineamientos del neoliberalismo como panacea.

Como se trata de acontecimientos nuevos, pues tal estrategia no ha existido desde siempre, como además en el pasado ha existido política de ciencia y tecnología sin preocupación ni discursos oficiales acerca del ámbito de la cultura científica, es normal que hubiera que introducir algunos análisis de acontecimientos. Pero el autor nunca pretendió hacer una investigación de carácter histórico. Como además tuvo que hacer análisis conceptuales muy agudos, la filosofía también es una herramienta importante de este estudio. Sin que la investigación sea estrictamente filosófica, los aspectos epistemológicos de la formulación del problema han sido tratados de forma estricta y generosa. Por otra parte, el autor también se interesó de una manera holística en el contexto sociocultural y político global que impulsó y abrió las condiciones para que el Estado colombiano adoptara entre sus políticas públicas estrategias relacionadas con la divulgación de las ciencias y la tecnología. Sin embargo, no se trata de una investigación en sociología de las ciencias ni tampoco en ciencia política. Estamos ante un resultado de investigación del campo CTS. Y para realizarlo el autor tuvo que recurrir a la constelación abierta por ese enfoque. De ahí que emplee teorías y métodos provenientes de campos como los estudios de políticas públicas, de comunicación pública de la ciencia y la tecnología, los estudios sociales y culturales de la ciencia y la tecnología, la sociología de la ciencia y la tecnología, la historia de la ciencia y la tecnología, la filosofía de la ciencia y la tecnología, la historia y la filosofía de la ciencia integradas, y la historia de la filosofía de la ciencia.

Esta primera investigación sobre la política de divulgación científica y tecnológica en Colombia es una gran herramienta para que la comunidad académica pueda continuar y alimentar el debate sobre el papel de la ciudadanía en los campos científico y tecnológico. Debate crucial en una sociedad en la que el Estado no ha podido adoptar, en pleno siglo XXI, una política clara sobre la educación de las nuevas generaciones.

 

 

Jorge Márquez Valderrama

Doctor en Enseñanza y Difusión de las Ciencias

y las Técnicas, Universidad París 11-Orsay (Francia)

Profesor titular, Facultad de Ciencias Humanas y Económicas,
Universidad Nacional de Colombia, sede Medellín

Introducción

 

 

 

 

No parece exagerado afirmar que una aproximación comprehensiva a la historia del siglo XX resulta incompleta si se ignora el papel de la ciencia y la tecnología, cuya presencia fue fundamental en la consolidación de los Estados nacionales durante ese siglo, debido a su lugar en eventos como las dos primeras guerras mundiales, conocidas como Guerra de los Químicos y Guerra de los Físicos, respectivamente, y en la Guerra Fría (Kevles, 1995). La ciencia y la tecnología multiplicaron la capacidad destructiva de los seres humanos con respecto a ellos mismos y al planeta y, como consecuencia, generaron serias dudas sobre uno de los ideales fundamentales del mundo moderno: que la ciencia y la tecnología son necesariamente benéficas para la humanidad, y que por ello los gobiernos deben hacer lo posible para impulsarlas y desarrollarlas en sus sociedades y entre sus ciudadanos.

El escepticismo sobre este ideal llevó a buscar nuevos medios para establecer relaciones más estrechas y de mayor confianza entre ciencia, tecnología y sociedad. El argumento principal era que, al menos en los Estados democráticos, los ciudadanos no solo debían participar, sino que tenían derecho a hacerlo en ciencia y tecnología, pues son asuntos que les afectan directa e indirectamente. Pero para que esto pudiera suceder, esos mismos ciudadanos debían estar mejor informados sobre tales temas. Pues, de otro modo, su participación resultaría inocua. Esto exigía una formación adecuada en ciencia y tecnología, y la divulgación científica apareció como la opción más expedita para lograrlo. Esta permitiría formar ciudadanos con la competencia suficiente para participar de una manera idónea en tales controversias y tomar así decisiones bien fundadas sobre distintos aspectos asociados con ellas.

La divulgación científica empieza a verse, por tanto, como un factor central de la política científica a nivel mundial. Y las justificaciones para esto varían de perspectivas puramente económicas y utilitarias a otras de orden más cultural, ciudadano y democrático (Sjøberg, 1997; Castellanos, 2008). Esto ha llevado a percibir la divulgación científica como un vehículo para promover ciertos fines epistémicos, políticos, educativos, económicos, entre otros, sobre la ciencia y la tecnología en la sociedad. Pero como contraparte, ha surgido un debate permanente sobre los medios más adecuados para lograr tales fines, debate que ha entrado en el corazón no solo de los estudios sobre ciencia y tecnología, sino en la formulación misma de la política científica. En todos los casos, el punto ha sido entender el funcionamiento de la divulgación científica como una estrategia de política científica para articular con mayor propiedad las relaciones que se espera que tengan la ciencia y la tecnología con la sociedad.

El principal interés de este trabajo es comprender qué ha sucedido en este ámbito de la política científica en el caso colombiano. Para eso, su punto de partida es una distinción entre las acciones y los discursos de divulgación científica.

Las acciones apelan a actividades concretas de divulgación científica como programas de radio y televisión, publicaciones en periódicos y revistas, contenidos de internet, puestas en escena, museos de ciencia y tecnología, entre otras cosas semejantes. Estas acciones permiten desarrollar procesos específicos de divulgación científica con diferentes públicos en diferentes espacios de la sociedad. Por ello, el interés aquí es determinar si, en efecto, el diseño de la política científica abarca este tipo de acciones, cómo las gestiona y evalúa, de modo que pueda precisarse si se convierten o no en factores de éxito en la implementación de dicha política.

Los discursos, por su parte, aparecen como aquel aspecto de la política científica que orienta las acciones, aquel aspecto que, por decirlo así, les da un propósito claramente identificable. En este caso, el interés es reconocer tres cosas. Primero, quiénes son los agentes sociales que emiten un discurso sobre divulgación científica enmarcado en esa política; segundo, cuáles son los valores o las actitudes que esos agentes sociales quieren promover hacia la ciencia y la tecnología en la sociedad mediante dicho discurso de divulgación científica; tercero, cuáles son los modelos comunicativos propuestos por dichos agentes sociales para promover efectivamente tales valores/actitudes sobre la ciencia y la tecnología en la sociedad mediante ese discurso de divulgación científica.

Este trabajo se propone aplicar la triada de agentes sociales, valores/actitudes y modelos comunicativos al análisis de los discursos de divulgación científica que aparecen en las políticas colombianas de ciencia y tecnología. Aunque se hacen algunas referencias a acciones, su foco son los discursos. Específicamente, su ­objetivo es determinar qué modelos comunicativos de divulgación científica se han empleado en el diseño de esas políticas. Mi tesis es que, aunque la presencia de la divulgación científica ha sido importante en distintos momentos, la reflexión que diferentes agentes sociales han hecho sobre ella se ha reducido casi exclusivamente, con muy pocas excepciones, a identificar los valores/actitudes que se quieren promover, pero sin clarificar los modelos comunicativos para alcanzarlos. En otras palabras, aunque los documentos de política científica puedan hacer suficiente énfasis en la importancia de la divulgación científica para promover diversos fines epistémicos, políticos, educativos o económicos, en realidad no se identifican los medios que resultarían más adecuados para lograrlos. Pueden, pues, identificarse los valores o las actitudes que distintos agentes sociales quieren promover hacia la ciencia y la tecnología en esos documentos, de acuerdo con ciertos intereses o tomas de posición, pero no propiamente los modelos comunicativos que permitirían promoverlos de forma efectiva en la sociedad.

Esta desarticulación entre fines y medios, o entre valores/actitudes y modelos comunicativos, ha tenido como principal consecuencia que los documentos colombianos de política científica den la impresión de que para promover dichos valores/actitudes es indiferente el modelo comunicativo que se emplee. Y como resultado, el discurso sobre divulgación científica ha tendido a conformarse con lo puramente programático y a veces abiertamente retórico, pero sin dar indicaciones precisas sobre cómo llevar a cabo procesos comunicativos acordes con los fines propuestos en la política. El propósito en cada momento ha sido impulsar ciertas agendas estatales y gubernamentales sobre ciencia y tecnología, lo que redunda en diferentes formas de gasto público, pero no en visiones concretas sobre cómo conectar la ciencia y la tecnología con la sociedad mediante procesos de divulgación científica.

Para desarrollar esta tesis, el primer capítulo ofrece una reconstrucción de los debates contemporáneos sobre qué es la política científica y sus transiciones en el ámbito mundial y latinoamericano durante los siglos XX y XXI. Su finalidad es presentar un contexto histórico y conceptual amplio que contribuya a una mejor compresión de la división clásica, y que se retoma allí, de la historia de la política científica colombiana en tres grandes períodos: antes de 1968, desde 1968 (fundación de Colciencias) hasta 1990, y desde 1990 (Ley de Ciencia y Tecnología) hasta 2017, año que sirve de límite para esta investigación. El segundo capítulo ofrece una discusión de corte más teórico sobre los modelos comunicativos de divulgación científica. El principal objetivo de esta discusión es minar la idea, un tanto reduccionista, pero bastante extendida, de que existe una oposición intrínseca entre modelos deficitarios y modelos democráticos, y que, por tanto, un modelo de divulgación científica puede ser deficitario o democrático, pero no ambas cosas al mismo tiempo. A partir de la identificación de dos tipos de déficit, epistémico y político, allí se muestra que puede establecerse una tipología mucho más compleja de modelos comunicativos de divulgación científica, y que algunos de ellos pueden ser a la vez deficitarios y democráticos. Por último, el tercer capítulo toma como punto de referencia los tres períodos de política científica colombiana y la discusión sobre modelos comunicativos de los dos primeros capítulos, y ofrece una reconstrucción de la presencia de la divulgación científica en la política científica colombiana a partir de la identificación de los valores o las actitudes hacia la ciencia y la tecnología que distintos agentes sociales, de acuerdo con sus propios intereses, han querido promover entre el público.

El tercer capítulo muestra que el período anterior a 1968 se caracterizó por una búsqueda más o menos consciente, pero pocas veces exitosa, de un lugar para la divulgación científica en la política científica, particularmente en relación con aspectos educativos. En cambio, desde 1968 hasta 1990 se da un proceso de consolidación de la divulgación en la política, proceso que tiene un momento inicial de silencio, pero que luego se ratifica como una manera de generar mano de obra especializada debido a la influencia de organismos internacionales como la OCDE, la UNESCO y el BID. Finalmente, desde 1990, con el giro hacia las políticas de ciencia y tecnología para una sociedad abierta, la divulgación científica empieza a prevalecer en la política científica colombiana como una estrategia para impulsar agendas neoliberales de apertura económica, particularmente gracias al éxito del discurso de apropiación social de la ciencia y la tecnología (ASCyT), que termina por dominar el pensamiento colombiano sobre divulgación científica. Así, en cada período se definen diversos fines para la divulgación científica en la política científica colombiana. Sin embargo, el problema de los modelos comunicativos solo empieza a tratarse en esa política científica en el tercer período, y de una forma más bien tímida e irregular.

La amplitud y el alcance que sugieren los capítulos que integran esta investigación aparecen como la principal novedad de este trabajo. Por una parte, aunque existen diversos estudios sobre estos tópicos, y eso se hace explícito en las referencias de cada uno de ellos, no existe ninguno que combine todos estos elementos, como se hace aquí. Por otra parte, el trabajo ofrece puntos de vista autónomos para abordar su problemática, como la negación de la dicotomía entre déficit y democracia, dicotomía ampliamente aceptada entre los estudiosos de la divulgación científica, la aproximación histórica al período anterior a 1968, que siempre se ha tratado de forma muy limitada en la literatura académica, o la identificación de los problemas conceptuales y de medición del discurso ­ASCyT, además del carácter neoliberal de su dimensión política, asuntos que no se mencionan en otros estudios.

Para lograr tal amplitud y alcance, este trabajo se aborda desde el enfoque conocido como Estudios de Ciencia, Tecnología y Sociedad (estudios CTS), debido a las posibilidades interpretativas y metodológicas que presenta. Por una parte, aunque el fenómeno de las relaciones entre la ciencia, la tecnología y la sociedad puede abordarse desde diversos enfoques teóricos y disciplinares, los estudios CTS ofrecen la opción de comprender tanto la influencia de los factores sociales en el desarrollo de la ciencia y la tecnología como las consecuencias del uso de la ciencia y la tecnología en el desarrollo de la sociedad. En otras palabras, los estudios CTS asumen una perspectiva crítica que busca analizar y comprender las relaciones bidireccionales que se establecen o pueden establecerse entre la ciencia y la tecnología con la sociedad. Y considerar estas relaciones bidireccionales da mayor amplitud interpretativa a la mirada que pueda tenerse desde otros enfoques. En particular, este trabajo aborda los compromisos políticos, económicos, educativos y epistémicos de ciertos discursos de divulgación científica en el país.

Por otra parte, los estudios CTS tienen como principal ventaja metodológica su flexibilidad, que permite integrar conceptos y métodos provenientes de diversos campos teóricos. Esta flexibilidad ha llevado a describirlos en ocasiones como enfoque multidisciplinar (Vaccarezza, 1998; Pavón Rodríguez, 1998) e interdisciplinar en otras (Cutcliffe, 1989; Cutcliffe, 2000; García Palacios et ál., 2001; Cazaux, 2008). Desde mi perspectiva, esta divergencia no envuelve una contradicción fundamental en cómo se concibe este enfoque, sino que apunta más bien a distinguir diferentes aproximaciones metodológicas al problema general de las relaciones entre ciencia, tecnología y sociedad. En otras palabras, los estudios CTS tienen un carácter pragmático, que permite concebirlos desde miradas disciplinares, multidisciplinares e interdisciplinares, dependiendo de las características propias del problema en consideración. Y esto conviene al tipo de investigación que se realiza en este trabajo, que no es propiamente histórica, filosófica o sociológica, por mencionar algunos de los enfoques más clásicos y disciplinares en este ámbito, sino basada en conceptos y métodos provenientes de campos teóricos como las políticas públicas, la comunicación pública de la ciencia y la tecnología, los estudios sociales y culturales de la ciencia y la tecnología, la sociología de la ciencia y la tecnología, la historia de la ciencia y la tecnología, la filosofía de la ciencia y la tecnología, la historia y la filosofía de la ciencia (HPS, su sigla en inglés), la historia y la filosofía de la ciencia integradas (&HPS) y la historia de la filosofía de la ciencia (HOPOS).

En particular, se intenta hacer un estudio cualitativo cuyo mayor volumen de evidencia se origina en un corpus conformado por material escrito ya publicado o existente de antemano como constituciones políticas, normas generales (leyes, decretos, resoluciones, etcétera), publicaciones periódicas oficiales, planes nacionales de desarrollo, documentos de política científica, encuestas de percepción, y otros documentos oficiales y semioficiales. Para lograr una interpretación coherente y adecuada de este corpus, se aprovecha la interrelación de técnicas provenientes de cuatro métodos que se emplean con frecuencia en los campos teóricos que acabo de mencionar, a saber: la investigación bibliográfica, el análisis filosófico de conceptos, el análisis de contenido y el análisis de discurso.

De acuerdo con García Palacios et ál. (2001, p. 127), los estudios CTS se concentran en tres campos de acción específicos:

 

• En el campo de la investigación, los estudios CTS se han planteado como una alternativa a la reflexión académica tradicional sobre la ciencia y la tecnología, promoviendo una nueva visión no esencialista y socialmente contextualizada de la actividad científica.

• En el campo de la política pública, los estudios CTS han defendido la regulación social de la ciencia y la tecnología, promoviendo la creación de diversos mecanismos democráticos que faciliten la apertura de los procesos de toma de decisiones en cuestiones concernientes a políticas científico-tecnológicas.

• En el campo de la educación, esta nueva imagen de la ciencia y la tecnología en sociedad ha cristalizado la aparición de programas y materias CTS en enseñanza secundaria y universitaria en numerosos países.

 

Este trabajo sería un aporte al campo de la política pública de los estudios CTS, como un intento por esclarecer las relaciones entre ciencia, tecnología y sociedad alrededor de la noción de divulgación científica en la política científica colombiana. El interés es comprender el uso que han hecho diversos agentes sociales de los discursos de divulgación científica como una estrategia de política científica para promover valores/actitudes particulares sobre ciencia y tecnología y contribuir así a reforzar diferentes formas de poder epistémico y político en la sociedad. Siguiendo a Foucault (1971), podría plantearse que la política científica y el rol atribuido a la divulgación científica en ella pueden verse como uno de los procedimientos empleados para controlar, seleccionar, organizar y redistribuir la producción de discurso científico en una sociedad.

Antes de terminar, quiero aclarar algunos puntos generales que pueden dar lugar a malentendidos. En primer lugar, aunque el corpus empleado en este estudio es amplio, nunca se ha pretendido que sea exhaustivo. Por ejemplo, no se han incluido comunicaciones internas institucionales, convocatorias, borradores de documentos oficiales, documentos municipales y departamentales, entre muchos otros. El foco para la elección del corpus ha sido principalmente, aunque no exclusivamente, que los documentos pertenezcan al orden nacional, bajo el supuesto de que otros documentos de diferente alcance se formulan con la intención de alinearse con aquellos documentos nacionales. Por ese motivo, sin duda algunos lectores podrán señalar la ausencia de documentos que habría sido importante incluir en el análisis, y posiblemente tendrán razón en sus apreciaciones. No obstante, la amplitud del corpus da confianza en que esos otros documentos, de llegar a examinarse, no comprometerían seriamente los argumentos y los resultados que se ofrecen aquí.

Un segundo elemento para resaltar es que este trabajo es un análisis de discursos sobre políticas de divulgación científica, y no propiamente una evaluación. Por ello, no se busca determinar si esas políticas son buenas o malas, beneficiosas o perjudiciales, ni ninguna otra valoración semejante. El propósito es diferente. Se parte de identificar algunos postulados y supuestos de ciertos discursos y desde allí se analizan sus consecuencias, como sus compromisos teóricos y las agendas que promueven. De ahí que no se asuma en ningún momento que esas políticas y sus discursos sean unitarios o estables en el tiempo, más bien se muestra cómo varían, precisamente debido a los cambios de postulados y supuestos, que a su vez llevan a cambios en los compromisos y las agendas. De ahí también que, aunque por razones de comodidad se emplee muchas veces la expresión política científica en singular, en realidad deba leerse e interpretarse siempre como un plural: políticas de ciencia y tecnología.

El carácter analítico de este trabajo también justifica la decisión de no dar definiciones propias sobre términos como divulgación, apropiación social, ciencia, tecnología y similares, lo que puede resultar frustrante o incluso chocante para algunos lectores. Sin embargo, es importante recordar en todo momento que el énfasis aquí es el análisis del discurso. En esa medida, no se pretende imponer ninguna definición particular sobre los discursos analizados. Más bien se asume que parte de la labor del analista es intentar comprender si hay definiciones claras de tales términos en dichos discursos y cuáles son, para luego extraer las consecuencias que puede implicar el compromiso con algunas de ellas o incluso carecer de ellas. Esto será particularmente explícito al analizar el discurso ASCyT en el tercer capítulo.

Finalmente, es pertinente insistir en que el foco de este trabajo son los discursos y no las acciones. Esto no significa que sea irrelevante comprender la conexión entre discursos y acciones. Por ejemplo, cómo acaso estas se derivan de aquellos, qué tan armoniosas son las relaciones entre ambas partes, o cómo las acciones inducen transformaciones en los discursos. El análisis ofrecido aquí es, por tanto, fragmentario, pero en el sentido de que nunca se pretende dar un análisis completo de la política científica colombiana en su totalidad. Por el contrario, se ofrece un análisis de una sección muy pequeña de esa política científica: aquella que tiene que ver con las políticas de divulgación científica. Y, de hecho, de una sección aún más pequeña: la que se refiere a los discursos de divulgación científica. Futuras investigaciones podrán ampliar las conclusiones alcanzadas en este estudio a otros ámbitos, o tal vez mostrar sus limitaciones.

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Estado, ciencia y sociedad: concepciones de política científica

 

 

 

 

La política científica (o si se prefiere, la política científica y tecnológica, la política de ciencia y tecnología, o las políticas de ciencia y tecnología, términos que uso indistintamente en este trabajo) es ante todo una política pública, y como sucede con otras políticas públicas, su estudio puede abordarse con la ayuda de marcos conceptuales provenientes de disciplinas como la economía, el derecho, la sociología, la historia, la filosofía, las ingenierías y, particularmente, la ciencia política, tal vez la disciplina que con más detalle se ocupa de las políticas públicas. Sin embargo, la política científica no suele figurar como un tema central en los debates sobre políticas públicas. Para corroborarlo basta con dar una mirada a los planes de estudio de cualquier universidad que tenga programas en alguna de las disciplinas que acabo de mencionar o a la tabla de contenido de obras de referencia tan importantes en este ámbito como Handbook of Public Policy (Peters y Pierre, 2006a), The Oxford Handbook of Public Policy (Moran, Rein y Goodin, 2006) o Dictionnaire des politiques publiques (Boussaguet, Jacquot y Ravinet, 2010). Por ese motivo, para mostrar en qué sentido la política científica es una política pública, este capítulo empieza por contextualizar las políticas públicas en general para, en las siguientes secciones, tratar con detalle el caso de la política científica en particular.

Antes de comenzar, es pertinente hacer una aclaración metodológica: mi aproximación a las políticas públicas, y en concreto a la política científica como política pública, involucra dos elementos. El primero es conceptual, y se refiere a la definición de política pública, que incluye factores como su diseño, su gestión y su evaluación. El otro elemento es histórico, y tiene como finalidad comprender las transiciones en los estilos o maneras de hacer política pública desde su aparición como campo autónomo de indagación en el período inmediatamente posterior a la Segunda Guerra Mundial. La comprensión de cada uno de estos dos elementos respalda la comprensión del otro, por esa razón, los considero complementarios entre sí.

El punto central a tener en cuenta es, entonces, que el caso de la política científica no es diferente en este aspecto al de otras políticas públicas. También en ella es posible identificar los dos elementos complementarios que acabo de mencionar, y por ello la estructura de este capítulo sigue esta idea general de tratar primero el elemento conceptual y luego el histórico. El siguiente apartado empieza con una mirada a las políticas públicas, como una forma de indicar el paralelo que quiero establecer posteriormente con la política científica.

 

1.1. Una mirada al concepto y a la historia de las políticas públicas

Una estrategia recurrente para comprender la particularidad de las políticas públicas frente a otros componentes del Estado es apelar a la diferencia que existe en inglés entre politics y policy (Meny y Thoenig, 1992; Lahera, 2004; Aguilar Astorga y Lima Facio, 2009). Politics (que podría traducirse como la política, con el artículo) apela a asuntos relacionados con la lucha por el poder y la autoridad entre los diferentes grupos que integran un Estado: partidos políticos, organizaciones sociales, personas naturales y jurídicas, entre otros. En cambio, policy (que podría traducirse como política pública) se refiere a planes de acción y acciones concretas para manejar los asuntos públicos. Siguiendo esta distinción, puede concluirse que mientras que la política se concentra fundamentalmente en la distribución del poder y la autoridad entre diferentes grupos de interés, las políticas públicas se entienden, siguiendo a Ortegón Quiñones (2008), como directrices de pensamiento que guían la acción, con el fin de alcanzar ciertas metas u objetivos que se espera que redunden en un beneficio para un sector público particular, sea este social (por ejemplo, una minoría, la educación) o geográfico (por ejemplo, el Pacífico colombiano, la cuenca del río Magdalena).