HISTORIA DE LA RELIGIÓN EN COLOMBIA
1510-2021
Historia de la religión en Colombia, 1510-2021
Resumen
Hasta hace poco tiempo la religión no era un tema de conversación en un hogar colombiano promedio. Era, eso sí, una vivencia, una práctica o, en el peor de los casos, una presencia nominal, esto es, se pertenecía a la religión por haber sido bautizado en ella, pero nada más. Sin embargo, desde hace un poco más de tres décadas, coincidiendo con la promulgación de la Constitución Política de 1991, la religión pasó a ser un tema de más abierta y amplia esfera de discusión. El hecho de que la cotidianidad mostrara la existencia de nuevas y variadas denominaciones religiosas, diferentes a la católica, y que a la vez estas tuvieran diversas formas cultuales, mostró la amplitud del fenómeno religioso en el país.
En 25 capítulos, este libro ofrece un amplio panorama sobre la historia de la religión en Colombia. Observamos la forma como, además del catolicismo romano, otras denominaciones cristianas y el judaísmo y el islam hacen presencia activa en el país, y no desde hace tres décadas como podría suponerse, sino desde mucho antes. Así, esta obra, que no es un punto de llegada que pretenda cerrar el tema, constituye un esfuerzo de síntesis que invita a reflexionar sobre uno de los asuntos más complejos de la historia colombiana, la historia de la religión.
Palabras clave: historia de la religión, sociología de la religión, Iglesia y Estado, cristianismo y política, iglesia católica, Colombia, 1510-2021.
History of Religion in Colombia, 1510-2021
Abstract
Until recently, religion was not a topic of conversation in the average Colombian household. It was an experience, for sure, a practice, or, in the worst case, a nominal presence—one belonged to the religion because of having been baptized in it, but nothing more. However, a little more than three decades ago, coinciding with the promulgation of the Political Constitution of 1991, religion became a more open and wide-ranging discussion topic. The fact that everyday life showed the existence of new and varied religious denominations, different from Catholicism, and that these, at same time, had diverse cultic forms, demonstrated the breadth of the religious phenomenon in the country.
In 25 chapters, this book offers a broad overview of the history of religion in Colombia, examining how, in addition to Roman Catholicism, other Christian denominations, Judaism, and Islam have been actively present in the country not just in the last three decades, as might be supposed, but since much earlier. Thus, this work, far from being a point of arrival that pretends to close the topic, is a synthesis effort that invites to reflect on one of the most complex issues of Colombian history—the history of religion.
Keywords: history of religion, sociology of religion, Church and State, Christianity and politics, Catholic Church, Colombia, 1510-2021.
Citación sugerida / Suggested citation
Cortés Guerrero, José David, (Ed.). Historia de la religión en Colombia, 1510-2021. Bogotá: Editorial Universidad del Rosario, 2022. https://doi.org/10.12804/urosario9789587847949
HISTORIA DE LA RELIGIÓN EN COLOMBIA
1510-2021
JOSÉ DAVID CORTÉS GUERRERO
—Editor académico—
KARIM LEÓN VARGAS
—Investigadora gráfica—
Historia de la religión en Colombia, 1510-2021 / José David Cortés Guerrero, editor académico.
Bogotá: Editorial Universidad del Rosario, 2022.
Incluye referencias bibliográficas.
1. Historia de la religión – Colombia – 1510-2021. 2. Iglesia y estado – Colombia – 1510-2021. 3. Cristianismo y política – Historia – Colombia – 1510-2021. 4. Iglesia católica – Historia – Colombia. 5. Sociología de la religión. I. Cortés Guerrero, José David II. Universidad del Rosario. III. Título.
200.9861 SCDD 20
Catalogación en la fuente – Universidad del Rosario. CRAI
DJGR 11 de octubre de 2021
© Universidad del Rosario
© Editorial Universidad del Rosario
Teléfono (57) 601 297 02 00, extensión 3113
Carrera 7a n.o 12B-41, oficina 501, Bogotá, Colombia
https://editorial.urosario.edu.co/
Primera edición: Bogotá, D. C., enero de 2022
© José David Cortés Guerrero, editor académico
© Textos: Carlos Arboleda Mora, Gabriel Cabrera Becerra, Fabio Hernán Carballo, Juan David Cascavita, Alberto José Campillo Pardo, José David Cortés Guerrero, Juan Felipe Córdoba-Restrepo, Leonardo Fabián García Rincón, Diana Paola Hernández, Juan Carlos Jurado, Jeiman David López Amaya, Andrés Felipe Manosalva Correa, Juana M. Marín Leoz, Katherinne Mora Pacheco, Aliza Moreno-Goldschmidt, Fernanda Muñoz, José Joaquín Pinto Bernal, William Elvis Plata, Gina Marcela Reyes Sánchez, José Eduardo Rueda Enciso, Jorge Enrique Salcedo Martínez, Rafael Tamayo Franco, María del Rosario Vázquez Piñeros, Odette Yidi David, Darío Arturo Zuleta
© Alejandro Chayne García, por la Presentación
Comité editorial: Sergio Andrés Pulgarin Molina, Catalina Lleras
Figueroa, Juan Felipe Córdoba-Restrepo
© Karim León Vargas, investigación gráfica
Ana María Mesa Bedoya, asistente en la investigación gráfica
© Fotografías: Archivo Fotográfico, Biblioteca Pública Piloto de Medellín para América Latina, Biblioteca Carlos Gaviria Díaz, Universidad de Antioquia, Biblioteca Luis Ángel Arango Biblioteca Nacional de Catar, Biblioteca Nacional de Colombia, Biblioteca Nacional de España, Biblioteca Nacional de Francia, Centro Cultural Biblioteca Luis Echavarría Villegas, Universidad EAFIT, Colección de Arte, Banco de la República, John Carter Brown Library, Library of Congress, Museo Colonial, Museo de Historia Nariñense Juan Lorenzo Lucero, Museo de la Independencia - Casa del Florero, Museo Nacional de Colombia, Museo Nacional del Prado, Museo Santa Clara, Repositorio Digital Universidad del Valle, The Morgan Library & Museum, The New York Public Library Wellcome Library, Archivo Histórico y Pinacoteca, Universidad del Rosario
Coordinación editorial: Ingrith Torres Torres
Corrección de estilo: Bibiana Castro Ramírez
Diseño y diagramación: Cristina Londoño Carder
Cubierta: Auguste Le Moyne / José Manuel Groot - atribuido
Une procession à Bogota, ca. 1835
Acuarela sobre papel verjurado de fabricación industrial,
21,1 × 27,3 cm
Reg. 5489, Colección Museo Nacional de Colombia
Foto: © Museo Nacional de Colombia / Samuel Monsalve Parra
ISBN: 978-958-784-792-5 (impreso)
ISBN: 978-958-784-793-2 (ePub)
ISBN: 978-958-784-794-9 (pdf)
http://dx.doi.org/urosario/9789587847949
Conversión ePub: Lápiz Blanco S.A.S.
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Página siguiente: “Cruz de Mayo, cerca de Panche”, dibujo de Riou, grabado de Hildebrand. Charles Wiener, Jules Crevaux, Désiré Charnay y Edouard Francois André. América pintoresca; descripción de viajes al nuevo continente por los mas modernos exploradores. Barcelona: Montaner y Simon Editores, 1884, 636.
Fotografía: Catalina Londoño Carder. Sala de Patrimonio Documental, Centro Cultural Biblioteca Luis Echavarría Villegas, Universidad EAFIT, Medellín.
CONTENIDO
PRESENTACIÓN
Alejandro Cheyne García
INTRODUCCIÓN: SOBRE LA HISTORIA DE LA RELIGIÓN EN COLOMBIA
José David Cortés Guerrero
PRIMERA PARTE. COLONIA. La intolerancia y el monopolio religiosos
EL PATRONATO REGIO EN LA AMÉRICA HISPANA
Juana M. Marín Leoz
LA EVANGELIZACIÓN DE LAS COMUNIDADES INDÍGENAS DEL NUEVO REINO DE GRANADA DURANTE EL SIGLO XVI
Leonardo Fabián García Rincón
LAS ÓRDENES RELIGIOSAS Y LA SOCIEDAD NEOGRANADINA, SIGLOS XVI-XIX
William Elvis Plata
VIDA RELIGIOSA FEMENINA EN EL NUEVO REINO DE GRANADA, SIGLOS XVII Y XVIII
Diana Paola Hernández Fernández
LA INQUISICIÓN EN LA NUEVA GRANADA
Alberto José Campillo Pardo
HISTORIA DE LA PRESENCIA JUDÍA EN COLOMBIA
Aliza Moreno-Goldschmidt
FASES Y FACETAS DEL ISLAM EN COLOMBIA
Odette Yidi David
LOS JESUITAS EN COLOMBIA
Jorge Enrique Salcedo Martínez, S. J.
LA IGLESIA Y EL MUNDO MATERIAL DURANTE EL PERIODO COLONIAL
José Joaquín Pinto Bernal
CLIMA Y RELIGIOSIDAD NEOGRANADINA, SIGLOS XVI A XIX
Katherinne Mora Pacheco
SEGUNDA PARTE. SIGLO XIX. De la intolerancia y el monopolio religiosos a la tolerancia religiosa
DE ANGOSTURA A LA SEPARACIÓN, 1819-1853: LAS RELACIONES ESTADO-IGLESIA EN LOS PRIMEROS AÑOS REPUBLICANOS
José David Cortés Guerrero
LA DOCTRINA LIBERAL: LAS MEDIDAS QUE AFECTARON A LA IGLESIA
Juan David Cascavita Mora
LA IGLESIA CATÓLICA EN LAS GUERRAS CIVILES COLOMBIANAS
Juan Carlos Jurado Jurado
LOS MASONES Y EL CONFLICTO RELIGIOSO EN COLOMBIA: LA LUCHA POR LA SEPARACIÓN DE PODERES
José Eduardo Rueda Enciso
ENTRE ANHELOS Y DIFICULTADES. PROTESTANTISMO EN COLOMBIA EN EL SIGLO XIX
Fabio Hernán Carballo
EDUCACIÓN “LAICA” Y RELIGIOSA EN LA COLOMBIA DEL SIGLO XIX: ENTRE DISCURSO Y PRÁCTICA
Fernanda Muñoz
LAS FORMAS DE SOCIABILIDAD RELIGIOSA EN EL SIGLO XIX
Darío Arturo Zuleta Gómez
LA DEVOCIÓN POPULAR EN COLOMBIA A PARTIR DE LAS NOVENAS
Carlos Arboleda Mora
TERCERA PARTE. SIGLOS XX-XXI. De la tolerancia religiosa a la libertad religiosa y de cultos
GENERALIDADES DE LA HISTORIA CONCORDATARIA EN COLOMBIA
Rafael Tamayo Franco
“EL SIGLO DE LAS MISIONES”. RESURGIMIENTO MISIONERO CATLICO EN COLOMBIA, 1880-1950
Juan Felipe Córdoba-Restrepo
MISIONES PROTESTANTES EN LA PRIMERA MITAD DEL SIGLO XX. HISTORIA INICIAL DE UNA CIUDADANÍA RELIGIOSA
Jeiman David López Amaya
IGLESIA, POLÍTICA Y VIOLENCIA EN COLOMBIA DURANTE LA CONCENTRACIÓN NACIONAL, 1930-1934
María del Rosario Vázquez Piñeros
LA JERARQUÍA DE LA IGLESIA CATÓLICA Y LA VIOLENCIA, 1945-1964
Andrés Felipe Manosalva Correa
IMPLANTAR UN DIOS EXTRAÑO. BREVE LECTURA DE LAS MISIONES CATÓLICAS Y PROTESTANTES EN LA SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XX EN COLOMBIA
Gabriel Cabrera Becerra
LA LIBERTAD RELIGIOSA Y DE CULTO: UN CAMINO EN CONSTRUCCIÓN
Gina Marcela Reyes Sánchez
BIBLIOGRAFÍA
Anónimo
Virgen del Rosario “La Bordadita”, siglo XVII
Bordado sobre tela, seda, algodón, lino, hilos metálicos, perlas y lentejuelas y óleo, 91 × 65,5 cm
Reg. 2919, Capilla de La Bordadita, Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario, Bogotá.
PRESENTACIÓN
Desde 2010 Colombia vive una época de celebraciones y conmemoraciones motivada por los 200 años de la Independencia, esto es, la ruptura del orden colonial y el inicio de la era republicana. La Universidad del Rosario se ha unido a estas celebraciones y conmemoraciones de la mejor manera como puede hacerlo, motivando reflexiones conducentes a pensar nuestro país. De esta labor puede verse un resultado concreto, como lo es la amplia y sólida producción editorial. En ella destacan varias obras centradas en la Independencia, la Reconquista y la formación y consolidación de la República. El libro que el lector tiene en sus manos va en esa dirección. Es una historia estructural y de larga duración de la religión en Colombia.
Hablar de religión en nuestro país es, por lo menos, complejo. Desde hace mucho tiempo es un tema que genera múltiples y variadas emociones y pasiones. En alguna época, no muy remota, provocaba odios y filias. Hasta muerte y destrucción se produjeron en nombre de la religión. Sin embargo, creemos que esa etapa de nuestra historia está siendo superada. Y en esa tarea contribuye la academia universitaria, que piensa y reflexiona sobre la religión en el país. Tomando como pretexto un par de conmemoraciones, los 200 años de la Constitución de Cúcuta, redactada en 1821, y los 30 años de la actual Carta Magna, redactada en 1991, la Universidad propone un documento colectivo en donde se indaga, estudia y expone la historia de la religión en lo que es la Colombia contemporánea desde el momento en el que el occidente europeo expandió su influencia a comienzos del siglo XVI hasta la actualidad.
Los artículos 18 y 19 de la Constitución Política de 1991 garantizan la libertad de conciencia y la libertad religiosa y de cultos, respectivamente. Estas y otras garantías individuales que hacen parte de nuestra cotidianidad no siempre lo fueron. En materia religiosa llegar a ese par de libertades fue un largo y complejo proceso. En este libro puede verse cómo lo fue. Una de las características de la obra es que mira la religión como ella debe ser vista, en la larga duración y estructuralmente. Y a partir de allí detallar las especificidades y las particularidades que permiten dilucidar la complejidad del tema. En ese sentido, los 25 autores reunidos apuntan a mostrar, con un lenguaje sencillo, y a la vez claro y argumentado, el papel desempeñado por la religión en la historia del país.
Uno de los valores del texto es que no tiene la pretensión de comenzar ni de cerrar el tema de la historia de la religión en Colombia; sobre este queda mucho por hacerse y por decirse. No obstante, sí es un libro, si no el primero, en el que se reflexiona en conjunto, y de una manera estructural, amplia, diversa e ilustrada, sobre la historia de la religión en el país. De este modo, esperamos que en los lectores la obra genere la posibilidad de recapacitar sobre un tema que debería ser de amplio y difundido conocimiento.
Bogotá, enero de 2022
ALEJANDRO CHEYNE GARCÍA
Rector, Universidad del Rosario
Grabado por Julio Flórez a partir de una fotografía de Racines y Compañía
“Bogotá. - Colegio de Nuestra Señora del Rosario, - Fachada de la capilla (carrera 2a al oriente)”,
Papel Periódico Ilustrado, año III, número 71, Bogotá (20 de julio de 1884): 384.
Hemeroteca, Biblioteca Luis Ángel Arango, Bogotá.
INTRODUCCIÓN
sobre la historia de la religión en Colombia
José David Cortés Guerrero
Hasta hace poco tiempo la religión no era un tema de conversación en un hogar colombiano promedio. Era, eso sí, una vivencia, una práctica o, en el peor de los casos, una presencia nominal, esto es, se pertenecía a la religión por haber sido bautizado en ella, pero nada más. No era un tema de conversación para evitar controversias y discusiones que podían tornarse acaloradas. En ese sentido, se asumía sin más, sin ningún cuestionamiento, como algo dado con anterioridad, un bien heredado, el cual no debía ponerse en duda. Estamos hablando, esencialmente, de la religión católica, apostólica y romana.
Paralelo a ello, el estudio de la religión, seguimos hablando de la católica, desde las ciencias sociales y las humanidades, estaba circunscrito a dos grandes miradas. Primero, la que consideraba que la religión había sido el elemento unificador, civilizador y modernizador del país y, por lo tanto, que debería ser una de las bases, si no el pilar fundamental, de la sociedad. Según esta mirada, la Iglesia, entendida como la institución conformada por especialistas administradores de lo sagrado, había desempeñado un papel fundamental y esencial para que la religión fuese esa base sólida. La segunda, como si se tratara de una confrontación, era la opuesta, es decir, indicaba que la religión católica, y por ende la Iglesia institucional, eran obstáculos que, históricamente hablando, habían impedido, y lo seguían haciendo, tanto al país salir del atraso como a la población salir de la ignorancia. Eran estas dos perspectivas, en términos sencillos, la apologista y la de diatriba1.
Sin embargo, desde hace tres décadas, coincidiendo con la promulgación de la Constitución Política de 1991, la religión pasó a ser un tema de más abierta y amplia esfera de discusión. El hecho de que la cotidianidad mostrara la existencia de nuevas y variadas denominaciones religiosas, diferentes a la católica, y que a la vez estas tuvieran diversas formas cultuales, mostró la amplitud del fenómeno religioso en el país. De esta forma, las ciencias sociales y humanas también ampliaron sus visiones sobre la religión, para tratar de superar la confrontación descrita líneas atrás.
El que la realidad, manifestada en la cotidianidad, mostrara que la religión católica ya no era la única con presencia activa en el país, trascendió a la esfera de la política, entendida esta como el escenario en donde se podían discutir y definir leyes, normas y, en esencia, formas de ver el mundo. Esto se manifestó con una presencia activa de diversas religiones por medio de grupos y colectividades políticas y partidistas. Incluso los católicos, que daban por sentado que los partidos políticos tradicionales, el Liberal y el Conservador, defendían el catolicismo, decidieron involucrarse de manera más abierta y activa en la política colombiana. Este escenario complejo, que pretendemos sintetizar en pocas palabras, motivó que las ciencias sociales y las humanidades tuvieran entre sus temas centrales de interés la religión. De esta forma la sociología, la antropología, la historia, la ciencia política, entre otras, se ocuparon de la religión como tema de investigación.
Al hacer una revisión de la producción académica sobre la religión en Colombia, es innegable que el catolicismo sigue siendo aquella sobre la que más se ha indagado. Esto tiene que ver con una relación directamente proporcional: la religión católica aún es la mayoritaria en el país. Incluso, el catolicismo, según diversas fuentes, incluyendo el Vaticano, es una religión en expansión, contrario a lo que podría creerse. Desde 2013 hasta el 2018, el catolicismo creció un 6%, y abarcaba, a finales de ese año, al 18% de la población mundial total, es decir, más de 1.300 millones de personas eran católicas, por lo menos nominalmente hablando. Brasil es el país con mayor población católica en el mundo, con más de 172 millones de creyentes. En cuanto a Colombia, disputa con Francia el sexto puesto de la lista de los países con mayor número de católicos en el mundo, con cerca del 85 % de su población, por debajo del ya citado Brasil, y de México, Filipinas, Estados Unidos e Italia.
Los datos atrás mostrados pueden ser cuestionados. Unos dirán que son exagerados; otros, que son incompletos. Desafortunadamente no existe información completa y detallada que nos dé cuenta sobre el número de creyentes que hay en Colombia, y entre ellos, a cuáles denominaciones pertenecen, esto es, cuáles religiones profesan, así sea de manera nominal. En el censo de 2018 se perdió la oportunidad de indagar sobre la religión que profesan, o si no lo hacen, todos y cada uno de los habitantes del país. Puede argumentarse que serían preguntas muy personales. Sin embargo, resulta fundamental para los análisis históricos, sociológicos, antropológicos, geográficos y demográficos conocer cómo está compuesta la población colombiana en cuanto a la religión, y a partir de allí entrar en detalles como, por ejemplo, determinar en cuáles regiones se concentran más denominaciones religiosas que otras.
Este libro es una historia concisa y sintética de la religión en Colombia. Muestra la forma como, desde la llegada de los europeos en la primera mitad del siglo XVI a lo que actualmente es Colombia, el catolicismo se convirtió en la única religión que podía profesarse, siguiendo el principio cuius regio, eius religio consistente en que la religión de los súbditos debería ser la misma que la del monarca. El libro finaliza mostrando el panorama actual, el de la libertad religiosa y de culto que quedó legislada, hace treinta años, en el artículo 19 de la Constitución Política de 19912; en la Ley 133 de 1994 o Ley de Libertad Religiosa y de Cultos; y la reciente creación, en 2018, de la Dirección de Asuntos Religiosos del Ministerio del Interior.
Con el arribo de los europeos, la Corona española pactó con la Santa Sede, por medio del patronato real, los mecanismos para favorecer el accionar de la Iglesia institucional en los nuevos territorios. De esta forma, la religión católica, y por ende la Iglesia como institución, se convirtieron en elementos importantes para la sociedad, más allá de la guía y el acompañamiento espiritual de la población. El poder de ambas, religión e Iglesia institucional, se puede notar en el accionar de las comunidades religiosas, masculinas y femeninas, así como del clero secular. También, en la acumulación de riquezas y en el control social que ejercieron sobre la población. Sin embargo, como lo muestra la experiencia judía, hubo la posibilidad, aunque con gran peligro de perder la vida misma, de profesar una religión diferente a la católica.
En esencia, en ese periodo al que se ha denominado Colonia, primó la intolerancia religiosa, entendida como la no aceptación de denominaciones religiosas diferentes a la católica, apostólica, romana, considerada como la única y verdadera religión. En ese sentido, otras denominaciones religiosas eran tomadas como falsas y como herejías. Así las cosas, lo que se observa es un monopolio religioso detentado por el catolicismo.
La Independencia es un punto de fractura relevante. Si bien la religión y la Iglesia católicas siguieron siendo importantes, apareció, junto con otros aspectos del liberalismo, el principio de la tolerancia religiosa. Como lo explicó el ecuatoriano Vicente Rocafuerte, durante la dominación española había tres grandes monopolios: el económico, el político y el religioso. El primero se rompería con el libre comercio; el segundo, con el principio de la soberanía popular y la división tripartita del poder; el tercero desaparecería con la tolerancia religiosa3. Esta última era asumida como un postulado liberal, pero también con pragmatismo, pues el comercio y la necesidad de poblar, por medio de la inmigración, amplios territorios, suponía brindar condiciones para que los inmigrantes pudiesen practicar su religión sin ser molestados por ello.
En la Constitución política de 1853 quedó plasmado, en el inciso 5.º del artículo 5.º, el principio de la libertad religiosa: “La República garantiza a todos los Granadinos: la profesión libre, pública o privada de la religión que a bien tengan, con tal que no turben la paz pública, no ofendan la sana moral, ni impidan a los otros el ejercicio de su culto”. Como puede verse, esta libertad estaba condicionada, pues, para la época, muchas cosas podían considerarse como perturbadoras de la paz pública y ofensoras de la sana moral, entre ellas, según amplios sectores de la sociedad, las reformas liberales que estaban afectando, de diversas maneras, a la Iglesia católica. Unos años antes, la expulsión de los jesuitas más otras reformas, sumadas a la manumisión de los esclavos y los proyectos federalistas antioqueños, provocaron una guerra civil. En esta, la de 1851, varios clérigos, algunos de los cuales ascendieron en la carrera eclesiástica y llegaron a ocupar sendos obispados años después, desempeñaron un papel determinante. Así, las reformas liberales, entre las que estaban la tolerancia religiosa o las de carácter educativo, como la fundación de la Universidad Nacional de los Estados Unidos de Colombia en 1867 o el Decreto Orgánico de Instrucción Pública Primaria de 1870, generaron continuos roces con el ideario conservador y con la Iglesia como institución. Esas diferencias pudieron manifestarse en las guerras civiles en las que, al ver con detalle, encontramos causales vinculadas con la religión y con la Iglesia católicas.
Pedro Alcántara Quijano
La Pola antes de su ejecución, ca. 1944
Óleo sobre madera, 53 × 38 cm
Reg. 7509, © Museo Nacional de Colombia, Bogotá.
A diferencia de lo que puede creerse, sobre todo por el auge del liberalismo como corriente ideológica y política, el siglo XIX no significó una crisis generalizada del catolicismo ni de la Iglesia. La religiosidad se mostró viva, como lo ejemplifican los espacios de sociabilidad o las creencias plasmadas en novenas y devociones, las cuales se manifestaban, de manera concreta, en momentos de crisis como, por ejemplo, sequías o inundaciones. Así, el siglo XIX fue un periodo de tensiones durante el cual, después de la Independencia, tanto la religión como la Iglesia, y sobre todo esta última, se acomodaron a las nuevas realidades republicanas. De igual forma, la intolerancia religiosa que caracterizó al mundo colonial fue dando paso, no sin conflictos, a la tolerancia religiosa, sin llegar plenamente a la libertad religiosa y de cultos.
Sobre la Regeneración, como proyecto político conservador, se ha afirmado que convirtió al país en uno confesional que favoreció a la Iglesia católica por medio de una especie de régimen de cristiandad, lo que se reforzó con la firma, con la Santa Sede en 1887, de un concordato. También, como puede verse en la Constitución Política de 1886, equiparó ser colombiano a ser católico. Sin embargo, desde comienzos del siglo XX, y a lo largo de esa centuria, la tolerancia religiosa siguió teniendo cabida y el número de denominaciones religiosas aumentó. De esa forma, tales denominaciones, más el catolicismo, continuaron con procesos de misión que buscaban captar, para cada una, nuevos y fervorosos fieles. Pero los conflictos no desaparecieron y la intolerancia religiosa estaba presente, como puede verse en La Violencia. A pesar de ello, la necesidad de reconocer la diversidad religiosa en el plano legal siguió latente hasta la promulgación de la Constitución Política actual.
Para finalizar, aunque no menos importante, es necesario hacer algunas aclaraciones sobre el libro Historia de la religión en Colombia, 1510-2021, y su alcance. En cuanto a su título sabemos que es un exabrupto histórico hablar de Colombia antes de la década de 1820. Sin embargo, aquí empleamos la convención nominal no para referirnos a la experiencia republicana, sino para aludir al espacio geográfico, el cual existió con diversos nombres antes de la denominación actual. Colombia es, así, una convención para facilitar el título del texto. La temporalidad está marcada por la fundación de Santa María de La Antigua del Darién, primer asentamiento español en lo que hoy es Colombia. En 2021 conmemoramos dos importantes acontecimientos: primero, los doscientos años de la Constitución Política de 1821, promulgada en la Villa del Rosario. Esta fue la primera carta magna que tuvo Colombia, conformada, también, por Venezuela y Ecuador. Si bien en ella no hay artículos explícitos sobre religión, en el texto titulado “El congreso general a los habitantes de Colombia”, se dedica un párrafo a la religión católica, apostólica y romana como la que profesaban todos los constituyentes, heredada de sus padres, y que sería, además, la religión del Estado, así como sus ministros los únicos con el libre ejercicio de sus funciones4; de igual forma, en los debates llevados a cabo, varios puntos fueron discutidos al respecto y varios fueron los clérigos que participaron en la convención que la redactó; incluso el vicepresidente del congreso constituyente fue el obispo de Mérida, Rafael Lasso de la Vega. Segundo, los treinta años de la Constitución vigente, en donde, como aludimos atrás, quedó plasmada la libertad religiosa y de culto que rige actualmente en el país; así como la libertad de conciencia.
Como podrá verse, el libro detalla, en veinticinco capítulos, lo que hemos expuesto en esta introducción. Brinda un panorama amplio para que el lector se dé una idea de la historia de la religión en Colombia, manifestada esencialmente en las tres grandes religiones monoteístas, de las cuales el cristianismo, en su variante católica, apostólica y romana, es la más visible y relevante. Pero, además, observamos la forma como otras denominaciones cristianas, además del judaísmo y del islam, hacen presencia activa en el país, y no desde hace tres décadas como podría suponerse, sino desde mucho antes.
Según se mencionó atrás, en Colombia, durante mucho tiempo, el estudio de la religión, del hecho religioso, y de todos los elementos que le son consustanciales, como la Iglesia —ya sea en tanto institución o como comunidad de fe— se abordó desde orillas opuestas. Se los vio como el lastre del cual la sociedad debería desprenderse para avanzar; también, como lo mejor que tenía el país, algo así como el eje cohesionador. En este libro puede observarse que no caemos en ese juego bipolar. No le apostamos a la interpretación básica de la máxima de Karl Marx, que perfeccionó a Ludwig Feuerbach y a Georg Wilhelm Friedrich Hegel, de que la religión es el opio del pueblo, pero tampoco consideramos que lo sea todo y que de ella dependa una sociedad5. No obstante, sí consideramos que la historia de Colombia no puede entenderse completa y complejamente sin estudiar a la religión y a las iglesias.
Como toda obra, es susceptible de mejorarse y complementarse. Podrá cuestionarse que tiene vacíos, sin embargo, consideramos que cumple con el requisito fundamental de mostrar, con rigor académico, la historia básica de la religión en el país. También es relevante indicar que, como se verá en los textos, los autores hemos trascendido la historiografía tradicional sobre este tema. Las interpretaciones de la gran mayoría de los textos producidos, hasta la década de 1980, sobre la historia religiosa de Colombia ya han sido superadas. El acercamiento y uso efectivo de los archivos y las hemerotecas, así como de los esquemas explicativos de las ciencias sociales y humanas, han mostrado que muchas de aquellas aproximaciones anteriores a la década de 1990 se construyeron a partir de lo intuitivo y de lo ideológico desconociendo las fuentes primarias.
De esta forma, proponemos este libro, no como un punto de llegada, tampoco como uno de partida, pues eso significaría desconocer los esfuerzos precedentes, sino como uno de tránsito, en donde se abren múltiples posibilidades para seguir explorando, desde la academia, lo que significa, ha significado y puede significar, la religión en Colombia.
PRIMERA PARTE
COLONIA
La intolerancia y el monopolio religiosos