Mons. Andrés Gemma
GEO · Grupo de Estudios Orionitas
Argentina - Uruguay - Paraguay
Gemma, Andrés Archivo Digital: descarga 1. Santos Cristianos. 2. Biografías. 3. Cristianismo. I. Ojea, Oscar Vicente, prolog. II. Silanes, Jorge David, trad. III. Solavaggione, Santiago Vicente, trad. IV. Título. CDD 235.2 |
Original: Fuoco al mondo! Breve sintesi biografica di Don Luigi Orione (1872-1940), Gorle, Ed. Velar, 19982.
© 2021 GEO - Grupo de Estudios Orionitas
1ª edición digital: abril 2022
Prólogo: Mons. Oscar Ojea
Traducción, revisión y adaptación:
Jorge Silanes; Santiago Solavaggione
Diseño de tapa: GEO
Foto de tapa: Arco de ingreso al Cottolengo de Claypole (Buenos Aires, Argentina).
Pequeña Obra de la Divina Providencia - Don Orione
Carlos Pellegrini 1441
C1011AAC – Ciudad de Buenos Aires
Argentina
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Digitalización: Proyecto451
Fuego al mundo, título del presente libro, es lo que este santo sacerdote de Dios y de todos, san Luis Orione, vino a “arrojar sobre la tierra”. (1) Fuego que permanece, chispa brillante, que con notoria evidencia se descubre en las páginas de su vida. Significativamente La chispa fue también el nombre que eligió san Luis Orione en 1895 para el primer folleto de la naciente fundación, que luego pasaría a llamarse y ser reconocida como La Obra de la Divina Providencia en 1903.
Pienso que esta gran síntesis de la vida y obra del Santo, escrita originalmente en italiano por Mons. Andrés Gemma, fdp, es una oportunidad para encender la esperanza en los corazones de hoy, oscurecidos por el pesimismo y la desesperación ante las dificultades del momento histórico que nos toca vivir. Hay grandes coincidencias entre el momento histórico profético del Santo y la desafiante realidad actual de nuestro país. Siempre he pensado que si Don Orione viviera hoy, con su mirada profunda y vivaz que sabía descubrir a Jesús en la pobreza extrema, se hubiera detenido sin duda en tantos jóvenes de nuestros barrios marginales, a quienes el consumo de drogas les está haciendo perder todo horizonte vital, todo futuro. Me lo imagino visitando nuestros barrios y promoviendo la creación de centros barriales para hacer experimentar un clima de familia a tantos jóvenes carentes de afecto y que suelen sustituir el calor familiar asociándose a bandas en las que se potencia la evasión y el delito. Me lo imagino acercándose a las esquinas donde se juntan estos muchachos y chicas, transmitiéndoles el amor de Jesús que no estigmatiza ni condena, sino que crea el espacio interior necesario para que resurja la vida en el corazón de estos hermanitos pequeños.
Tanto jóvenes como adultos de distintas vocaciones pueden acompañar los pasos de este Santo para encontrar respuestas acerca de su vocación misionera actual.
¿Cuál fue la misión de Don Orione? Un fiel reflejo de la misión de Jesús, que no vino a llamar a los justos, sino a los pecadores (cf. Mt 9, 13; Mc 2, 17; Lc 5, 32). ¿Por qué vino de Italia y se quedó en la Argentina? Por una invitación providencial de la Virgen. Entra en un templo de Victoria y se encuentra con la imagen de su amada virgen de la Guardia. Sin dudarlo, acepta la atención pastoral de este pueblo y lo adopta como propio. “¡Ave María y adelante!” será su lema frente a cualquier adversidad en su vocación de consumirse por la salvación de los más pobres de entre los pobres.
Solo tengo un deseo: amar al Señor y a la Santa Iglesia, las almas, los pobres, los niños pobres, los abandonados, la clase pobre, losobreros, los comunistas. Quisiera morir por estos hermanos míos y ser olvidado por todos, vivir y morir olvidado por todos, a los pies de todos y solo amar a Jesús, la Santa Iglesia y a todos y perderme en el Señor… (2) Y también solía decir maravillado: “En el más desvalido de los hombres, brilla el rostro de Dios”.
Volvamos así a la idea del fuego, de la chispa. El santo padre Francisco, en la homilía de la Navidad pasada, también nos habló de este misterio a través de la aparentemente insignificante “chispa revolucionaria de la ternura de Dios”, que es capaz de cambiar toda oscuridad y toda pobreza: “en Belén se generó una pequeña abertura para aquellos que han perdido su tierra, su patria, sus sueños”. (3)
Don Orione, hombre de oración y de acción —“peón de la Divina Providencia” como se apodaba así mismo—, nos deja hoy esta simple enseñanza:
Tenemos que ser santos, pero no tales que nuestra santidad pertenezca solo al culto de los fieles o quede solo en la Iglesia, sino que trascienda y proyecte sobre la sociedad tanto esplendor de luz, tanta vida de amor a Dios y a los hombres que más que ser santos de la Iglesia seamos santos del pueblo y de la salvación social. (4)
Bajo su mirada llena de luz, prepararemos con fe, alegría y acción de gracias este tiempo providencial previo a la celebración por los 100 años de la llegada de Don Orione y sus primeros religiosos a Uruguay y Argentina. En efecto, en los años 2021 y 2022 viviremos este jubileo. Los invito especialmente a visitar y a rezar ante el corazón de Don Orione (5) para que nos ayude a imitarlo en su entrega generosa y sin reservas al servicio de los pobres. Invocando la ayuda de la Virgen que supo transformar el pesebre “en la casa de Jesús, con unos pobres pañales y una montaña de ternura” (Evangelii Gaudium, 286). Las páginas de este libro tocarán nuestro corazón y nos ayudarán a vivir una profunda conversión pastoral.
A quienes se acerquen a su lectura les envío mi fraterna bendición,
+ Mons. Oscar V. Ojea
Obispo de San Isidro
Presidente de la Conferencia Episcopal Argentina
San Isidro, 26 de enero de 2018.
1- Cf. Lucas 12, 49: He venido a arrojar un fuego sobre la tierra, ¡y cuánto desearía que ya estuviera encendido!
2- G. PAPASOGLI, Vida de Don Orione, Buenos Aires, Pequeña Obra de la Divina Providencia, 2006, 355.
3- Cf. Homilía de Navidad, Domingo 24 de diciembre de 2017, en la basílica de San Pedro, Misa de Nochebuena.
4- DON ORIONE, Un profeta de nuestro tiempo: las más bellas páginas del santo de la caridad, edición con motivo de los 100 años de la primera llegada de San Luis Orione a Latinoamérica, Buenos Aires, Pequeña Obra de la Divina Providencia, 20213
5- La reliquia del corazón del Santo se encuentra en el Santuario ubicado dentro del Pequeño Cottolengo de Claypole (provincia de Buenos Aires, Argentina).